Estados Unidos expulsó este miércoles al encargado de negocios de Venezuela en Washington junto con otros dos diplomáticos, en respuesta a expulsión la víspera de tres representantes estadounidenses de Caracas, dijo un funcionario del Departamento de Estado. Uno de ellos es Calixto Ortega, encargado de Negocios de Venezuela en Estados Unidos.
Washington declaró “persona non grata” al encargado de negocios de la embajada venezolana, Calixto Ortega, la segunda secretaria, Mónica Sánchez, y la cónsul en Houston, Marisol Gutiérrez, y les dio 48 horas para salir del país, dijo el funcionario, que pidió el anonimato, informa AFP.
“Es lamentable que el gobierno venezolano ha nuevamente decidido expulsar a diplomáticos estadounidenses basado en alegatos infundados, lo que exige acción recíproca”, agregó al confirmar en la madrugada la expulsión luego de que se anunciara a última hora del martes en Caracas.
No obstante, aún no había un pronunciamiento oficial de Washington.
El gobierno venezolano “repudia” la expulsión de sus diplomáticos, dijo la cancillería venezolana en un comunicado.
“No se puede considerar esta una decisión recíproca, al observar la conducta inequívoca de nuestros funcionarios, que no han osado en ningún momento sostener reuniones con grupos contrarios al Gobierno del Presidente Barak Obama o con personas interesadas en actuar en contra del Gobierno estadounidense”, agrega el comunicado.
El presidente venezolano, Nicolás Maduro, había expulsado el lunes a tres diplomáticos estadounidenses, entre ellos la encargada de negocios, Kelly Keiderling, tras acusarlos de fomentar junto con la oposición supuestos actos de sabotaje económico y eléctrico en Venezuela, por lo que les dio 48 horas para salir del país, plazo que se cumple este miércoles.
Además de la encargada de negocios, Caracas expulsó a los funcionarios David Moo y Elizabeth Hoffman.
“Rechazamos por completo la alegación del gobierno venezolano sobre una participación de Estados Unidos en cualquier conspiración para desestabilizar al gobierno de Venezuela”, dijo el funcionario del Departamento de Estado, reiterando conceptos vertidos más temprano por la portavoz Jennifer Psaki.
Psaki había señalado asimismo que “de acuerdo a la Convención de Viena sobre relaciones diplomáticas, Estados Unidos podrá tomar medidas de reciprocidad”.
También recordó que los dos países no mantienen embajadores, por lo que el encargado de negocios es el más alto representante en las respectivas legaciones.
El gobierno venezolano rechazó por su lado declaraciones efectuadas por Keiderling en la tarde del martes en Caracas, en las que aseguró que “todas las acusaciones de sabotaje, de conspiración, de que nosotros vamos a acabar con el mundo, son falsas” y reconoció haberse reunido con varios miembros de la sociedad civil venezolana como parte de su labor diplomática.
“Estas declaraciones son una confesión de la abierta injerencia en los asuntos internos de Venezuela, razón por la cual la funcionaria fue declarada como persona no grata y exhortada a abandonar el territorio venezolano”, indicó el comunicado de la cancillería venezolana.
En una retransmisión obligatoria por todas las radios y televisiones del país, Maduro difundió el martes imágenes de diarios que dan cuenta de viajes de los estadounidenses al interior de Venezuela, listas de pasajeros en los vuelos donde viajaron y fotografías de ellos en aeropuertos.
Las imágenes también mostraban a los tres diplomáticos saliendo de reuniones con líderes de la oposición venezolana en la ciudad de Puerto Ordaz, en el estado Bolívar.
El mandatario venezolano aseguró que sobraban pruebas “de la participación de estos tres funcionarios de materia directa, una de ellas conspirando con gente de la derecha, para sabotear el sistema eléctrico”.
El 3 de septiembre, una falla eléctrica dejó al 70% del territorio venezolano sin luz durante varias horas y en los últimos meses la escasez de alimentos y diversos productos ha recrudecido, lo que es atribuido por el presidente a un “sabotaje” de la oposición a fin de promover protestas sociales.
Según Psaki, las denuncias contra los tres funcionarios diplomáticos se apoyan en un viaje que realizaron al estado Bolívar pero aseguró que “no hubo nada de extraordinario” en ese desplazamiento.
Los tres diplomáticos “estaban allí conduciendo sus actividades normales. Nosotros mantenemos contactos regulares a través de todo el espectro político venezolano. Y mantenemos una perspectiva amplia con relación a Venezuela”, agregó.
“Tenemos una relación con Venezuela que hemos estado trabajando desde hace algún tiempo, y no vamos a cesar en esos esfuerzos”, dijo, pero apuntó que “esto pasó recién anoche (lunes) y estamos aún analizando las acciones que adoptaremos en respuesta”.
Ambos países mantienen tensas relaciones desde el gobierno del fallecido Hugo Chávez (1999-2013) y carecen de embajadores desde 2010.
Pese a que hubo intentos de acercamiento, Caracas los dio por terminados en julio pasado tras críticas a Venezuela de la ahora embajadora de Washington ante la ONU, Samantha Power.
Nada de ello impide que Estados Unidos sean los principales compradores de crudo de Venezuela, que tiene las mayores reservas de ese recurso en el mundo.
AFP