El papa Benedicto XVI instó este lunes a una solución negociada de los conflictos, en particular el de Siria, del que advirtió que sólo habrá perdedores en caso de que se prolongue, y la República Centroafricana que no debe caer en las “garras de una guerra civil”.
En el tradicional discurso para conmemorar el inicio de año que pronunció en francés, ante el cuerpo diplomático de los 179 países acreditados ante la Santa Sede reunidos la Sala Real del Palacio Pontificio, el Papa predijo que el conflicto “no tendrá vencedores, sino solo vencidos en caso de que perdure, dejando detrás solo un campo de ruinas”.
El Papa evocó los “terribles sufrimientos” de los sirios y pidió a los jefes de Estado implicados “sensibilidad” para que “se entreguen de manera urgente las ayudas indispensables para hacer frente a la grave situación humanitaria” y volvió a pedir que se “acallen las armas y prevalezca lo antes posible un diálogo constructivo”. AFP