La oposición venezolana insiste en que se cumpla la Constitución: si Hugo Chávez no se presenta a su investidura el próximo 10 de enero, debe ser reemplazado por el presidente de la Asamblea Nacional, en este caso Diosdado Cabello, para que convoque nuevas elecciones presidenciales, publica ABC de España.
El vicepresidente y canciller Nicolás Maduro y el mismo Cabello —ratificado este sábado en el cargo por la mayoría chavista— buscan postergar la fecha de la jura de Chávez por encontrarse convaleciente de una operación de cáncer en La Habana. Sin embargo, los jefes de la oposición rechazan el plan del Gobierno de que el enfermo líder bolivariano siga gobernando desde el exterior.
Ludmila Vinogradoff / Corresponsal en Caracas
Ya Ramón Guillermo Aveledo, secretario ejecutivo de la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD), exhortó al Ejecutivo a acatar la Constitución. Aveledo precisó que la fecha del 10 de enero establece el final y comienzo de un periodo presidencial; y para asumir el nuevo mandato debe estar presente el presidente que haya ganado las elecciones, tal y como establece la Carta Magna.
La diputada de la oposición María Corina Machado señaló por su parte que la Constitución es clara en cuanto a la toma de posesión del 10 de enero y no se presta a dobles interpretaciones. Machado sostiene que Maduro y Cabello prefieren aplazar la fecha por conveniencia.
Julio Borges, coordinador de Primero Justicia, partido que integra la MUD, está convencido de que los representantes del chavismo tienen conflictos internos y están enfrentados. «El Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) se salta la Constitución debido a la desconfianza existente entre las facciones de Maduro y Cabello».
Permiso de la Asamblea
Los dos portavoces del chavismo afirmaron que la jura del cargo era un simple acto de formalismo y que Chávez podía seguir gobernando después del 10 de enero, porque estaba amparado por el permiso que concedió la Asamblea Nacional. «La tesis del oficialismo de restarle importancia a la jura presidencial del 10 de enero la lanza el PSUV por un problema interno, es para negar a toda costa que el próximo presidente interino sea Diosdado Cabello», subrayó Borges.
«Ese gran abrazo fue prefabricado para mostrar una unidad que no existe»
Durante la instalación de la nueva directiva de la Asamblea Nacional el pasado sábado, Cabello y Maduro se abrazaron para despejar las dudas sobre su unidad. «Ese gran abrazo fue prefabricado para mostrar una unidad que no existe», afirmó el representante del partido Primero Justicia.
Borges se refirió, por último, a las agresiones verbales contra los diputados opositores en la sesión de investidura. «Maduro y Cabello compiten por demostrar quién es más radical y en esa competencia lo que han hecho es inyectar odio al país».
Si los dos dirigentes del Partido Socialista Unido de Venezuela «piensan que el hueco de liderazgo lo van a llenar con odio y con miedo, están equivocados; si van a elegir el odio y el miedo para tratar de ocupar un cargo que les queda grande (la presidencia del país), están equivocados», sostuvo en una rueda de prensa como coordinador de Primero Justicia.