Texto: globovision.com
La rectora de la Universidad Central de Venezuela, Cecilia García-Arocha, emitió un comunicado para rechazar los recientes actos delictivos ocurridos en la Ciudad Universitaria de Caracas, donde se registró el hurto de 12 áreas entre Facultades y Dependencias el pasado 2 de enero.
“Manifestamos nuestro repudio y firme rechazo, y pedimos arbitrar medidas que conduzcan a aclarar los hechos, como en efecto ya lo hemos realizado al convocar al CICPC, cuyos funcionarios en el día de ayer (lunes) realizaron la experticia correspondiente dando inicio a las averiguaciones penales, de manera de encontrar los responsables y recurrir a las instancias que corresponda para aplicar las sanciones a que hubiese lugar”, dice el documento.
Lea parte del comunicado
Desde el inicio de la gestión Rectoral (junio 2008), ha sido preocupación de este Rectorado y de quienes junto a nosotros conforman el equipo directivo la situación de seguridad de la Ciudad Universitaria de Caracas y de todas nuestras sedes en la Capital e interior del país .En este sentido se han emprendido acciones tendientes a su mejoría. Dichas acciones pasan por la reestructuración de la Dirección encargada de ello; comunicación y apoyo permanente a su trabajo dentro del marco de la legalidad y respeto a los derechos humanos; retomar el proyecto formulado por el Arquitecto Carlos Raúl Villanueva que dotaba a la Universidad de unas puertas que, sin cercenar el acceso a ella y respetando el tránsito hacia las instalaciones hospitalarias que en ella tienen sede, proveía de seguridad en la medida que se controlaba éste durante las horas en que no había actividad, preservando de esta manera la integridad de su patrimonio.
Para nadie resultaba extraño el hecho de que en particular nuestra Ciudad Universitaria desde varios años atrás venía siendo objeto de actos contrarios a la legalidad, como lo era el tráfico de sustancias estupefacientes, los hurtos esporádicos, incluso las agresiones a instalaciones, todo ello producto entre otras cosas de la facilidad de acceso, de la ausencia de control policial interno en virtud de la restricciones que para ello establece su condición autonómica, pero que no eximen de su presencia ante circunstancias de extrema gravedad previa solicitud de sus autoridades. A ello se unía de manera significativa, la ausencia de un estricto mecanismo de selección, reclutamiento, seguimiento y estímulo al personal adscrito a esta Dirección.