Los gemelos, de 45 años, vivían juntos en la región de Amberes, y estaban perdiendo progresivamente la vista desde hace varios años. Ambos pidieron a médicos de Bruselas que los ayudaran a morir, según el diario Het Laatste Nieuws.
Estos médicos aceptaron el 14 de diciembre tal pedido, pese al hecho de que los gemelos no sufrían de una enfermedad en fase terminal.
Poco después de su fallecimiento, los socialistas belgas presentaron una propuesta de modificación de la ley de 2002, para ampliarla a menores y a personas afectadas por Alzheimer.
Bélgica fue el segundo país del mundo, tras Holanda, en legalizar la eutanasia, pero la ley belga se aplica actualmente a las personas de más de 18 años.
Unos 1.133 casos de eutanasia -sobre todo enfermos de cáncer en fase terminal- han sido registrados en 2011, según cifras oficiales. AFP