La guerrilla de las FARC anunció este domingo el fin de la tregua unilateral de dos meses que decretó al iniciar en noviembre en La Habana las negociaciones de paz con el gobierno de Colombia, al que pidió sin embargo estudiar la posibilidad de analizar “cese bilateral del fuego”.
“Con dolor en el corazón debemos admitir que vuelve la etapa de los partes militares de guerra que nadie quiere”, declaró a la prensa el jefe negociador del grupo rebelde colombiano, Iván Márquez, al iniciar una nueva jornada de conversaciones con los delegados del gobierno del presidente Juan Manuel Santos.
No obstante, Márquez, también número dos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, comunistas), pidió al Gobierno “que estudie la posibilidad de analizar un cese bilateral de fuego y de hostilidades, para rodear con un ambiente tranquilo estas conversaciones de paz”.
“Y si por alguna circunstancia el gobierno de Colombia estima no pertinente ni necesario aportar este medio ambiente (…) entonces le proponemos que busquemos un tratado de regularización de la guerra”, para “evitarle a la población mayores padecimientos”.
En un comunicado que leyó anteriormente, Márquez destacó “el reconocimiento” que hizo Santos “del cumplimiento por parte de las FARC” del alto al fuego, que regirá hasta las 00.00 horas de este domingo, y el grupo insurgente cumplió “en medio de una insensata ofensiva militar del Estado”.
La delegación del gobierno, que encabeza el exvicepresidente colombiano Humberto de la Calle, no hizo declaraciones a la prensa este domingo a su entrada al Palacio de las Convenciones, sede de los diálogos.
No obstante, adelantándose el sábado al anuncio de las FARC, Santos destacó que la Fuerza Pública estaba preparada para responder a las acciones armadas de la guerrilla.
Tanto las Fuerzas Militares como la Policía “saben perfectamente qué hacer a partir de mañana (domingo)”, dijo el mandatario colombiano en un evento público en el municipio de Padilla (departamento de Cauca, suroeste).