Un cable submarino de fibra óptica que promete acelerar el acceso a internet y las comunicaciones telefónicas de Cuba para llevarlas al siglo XXI dio señales de vida esta semana, dos años después de haber sido trasladado desde Venezuela hasta la isla caribeña, reseña Reuters.
El cable, llamado “Alternativa Boliviariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA-1)” y que fue financiado por el Gobierno de Venezuela, se encuentra bajo el Caribe y se lanzó con bombos y platillos en el 2010 aunque se conectó a Cuba en febrero del año siguiente.
Desde entonces ha estado inactivo y el Gobierno cubano ha mantenido silencio sobre el tema.
“He tenido un ojo en él. La gente se pregunta por qué no ha estado el cable en uso”, dijo Doug Madory, de Renesys, una compañía estadounidense que monitorea el servicio mundial de internet y que el domingo reportó la primera actividad del cable submarino en la página web de la empresa.
Cuando esté completamente operativo, le proporcionará a Cuba una velocidad de descarga 3.000 veces más rápida que la actual y será capaz de manejar millones de llamadas telefónicas al mismo tiempo, dijo el Gobierno cubano mientras se disponía a poner el cable en funcionamiento.
Hasta el momento, Cuba accede a internet mediante una comunicación satelital que es muy lenta y costosa, y culpa al embargo que aplica Estados Unidos a la isla desde hace más de medio siglo de no poder conectarse a los cables submarinos que pasan cerca a sus costas por el Caribe.
El cable debía entrar en funcionamiento en julio del 2011.
Cuba monopoliza las comunicaciones y la economía está controlada por el Estado. No hay internet de banda ancha en la isla y los pocos usuarios de la red sufren largas esperas para abrir un correo electrónico y mucho menos para bajar una foto o un vídeo, lo que también dificulta las operaciones de negocios y gubernamentales.
La estatal Oficina Nacional de Estadísticas informó que el número de “usuarios de internet” llegó a 2,6 millones en el 2011 en una población de 11,2 millones de habitantes, pese a que la mayoría de los cubanos utiliza solamente “intranet”, controlada por el Gobierno y que se ofrece en clubes de computación, escuelas y oficinas.
Cuba reporta el uso de intranet como internet a pesar de que el acceso a la red está prohibida sin el permiso requerido por las autoridades.
Ni el Gobierno, ni la estatal empresa de telecomunicaciones de Cuba, ETECSA, estuvieron disponibles para hacer comentarios el martes acerca del aumento de la velocidad de la transmisión.
“Cuando hay algunos datos inusuales vamos a verlo. Pudimos ver cómo los paquetes largos llevan un nuevo camino y el tráfico es más rápido”, dijo Madory. “Vimos aparecer a Telefónica de España como proveedor de Cuba”, dijo.
“Pudimos ver que hay un nuevo camino y el tráfico va más rápido. En este caso fue demasiado rápido para ser una transferencia satélite puro, aunque sigue siendo bastante lento y sería inaceptable en la mayoría de los países desarrollados”, agregó Madory.
El martes, la velocidad de las transmisiones por internet de Reuters en su oficina de La Habana aumentaron significativamente, al parecer porque ETECSA comenzó a vincular a los clientes al cable, aunque la velocidad era todavía muy por debajo de lo que se podría esperar.
“A las 9.00 de esta mañana nuestra latencia al ping había mejorado considerablemente (…) y no hay otra explicación que el cable”, dijo a Reuters su técnico en comunicaciones en Cuba.
La latencia al ping registra el tiempo que se tarda en enviar los datos a una ubicación y recibir la confirmación que llegó al servidor original.
Si disminuye la latencia, la velocidad de transmisión es más rápida. Debido a la ley de la física, las transferencias de satélite no pueden ser de cierta latencia debido a la velocidad de la luz hacia el satélite y su regreso.
(Reporte adicional de David Adams)