Cientos de manifestantes se enfrentaron hoy a la policía en los alrededores de la capital de Baréin después del funeral de un menor de ocho años que podría haber muerto asfixiado por gases lacrimógenos, denunciaron activistas.
Las fuerzas de seguridad dispararon gases lacrimógenos y persiguieron a los manifestantes en las aldeas de Sanabis, Daih y Jid Hafs, en las inmediaciones de Manama.
Varias personas resultaron heridas o fueron detenidas mientras los manifestantes intentaban acceder a la plaza Lulu (perla) de la capital, el epicentro de las revueltas que estallaron hace casi dos años en el país a favor de reformas democráticas.
Previamente, miles de personas asistieron al funeral de Qasim Habib Marzuq, un niño que murió el sábado pasado en el hospital tras haber sufrido problemas respiratorios como consecuencia de la inhalación de gases en su hogar durante las recientes protestas.
El pasado viernes, al menos 45 personas fueron detenidas en manifestaciones en Manama, después de que esta semana los principales grupos de la oposición aceptaran una nueva oferta de diálogo del régimen para acabar con la crisis en medio de una escalada de tensión.
Sin embargo, la Coalición 14 de Febrero, que agrupa a movimientos pro reforma, se han mantenido al margen de esta invitación, puesto que sigue sin reconocer a la monarquía de Baréin.
Desde febrero de 2011, Baréin, con una población de mayoría chií, es escenario de protestas contra la minoría suní gobernante, que en ocasiones han derivado en disturbios dejando al menos 123 muertos, según la oposición. EFE