Horas después del homicidio, uno de los presuntos responsables del crimen fue abatido en Parcelas de El Roble, informa Correo del Caroní.
Limber Rodríguez, sargento segundo de la Guardia Nacional Bolivariana, se desplazaba en una moto en El Roble por Fuera, buscando una caja para armar un paquete que se llevaría a Barquisimeto, a donde tenía previsto viajar para visitar a su familia.
Durante ese recorrido, se acercó a un puesto de empanadas que estaba siendo atracado. Los ladrones, al verlo, le dispararon y el uniformado cayó muerto. Diez minutos después, comenzó una redada militar que terminó con el abatimiento de uno de los presuntos responsables en Parcelas de El Roble. Con Rodríguez, fueron tres los funcionarios asesinados en menos de 24 horas en San Félix.
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Germán Dam V.
Fotos Carlos León
En menos de 24 horas tres efectivos fueron asesinados en San Félix. El lunes resultaron muertos, en un mismo hecho, uno de la Policía del estado Bolívar (PEB) y uno de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB). Ayer, otro militar cayó en manos del hampa.
Limber Rodríguez, de 21 años de edad y sargento segundo de la Guardia Nacional Bolivariana adscrito al puesto de Palúa, resultó tiroteado en El Roble por fuera cuando se acercó a un puesto de empanadas que era atracado por una pareja de antisociales. Le dispararon para quitarle su moto, una Empire, color rojo.
Una comisión de castrenses se acercó al sitio, adyacente a la sede de la Federación Venezolana de Maestros, e inmediatamente reconocieron a su compañero herido. Lo trasladaron al hospital de Guaiparo, pero ingresó muerto. Recibió un disparo en la pierna izquierda y otro en el pecho.
La noticia se difundió, y a eso de las 9:10 de la mañana, 10 minutos después del fallecimiento de Rodríguez, comisiones de la GNB, PEB y Patrulleros de Caroní tomaron por completo Las Parcelas de El Roble. Cerca de la línea férrea de Ferrominera hallaron la moto del joven.
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Horas de tensión
Más de 180 funcionarios de diversos cuerpos se desplegaron a lo largo de la calle México. Unos custodiaban el perímetro y otros ingresaron al monte para capturar a los homicidas. A las 9:30 se escuchó el primer intercambio de disparos.
La búsqueda y la tensión continuaron hasta las 10:20, cuando una segunda balacera se escuchó en la zona boscosa. Al mediodía hubo más disparos y más alboroto. Pedro Heredia, sargento segundo de la GNB, fue trasladado al centro médico tras caer de su moto y fracturarse una pierna.
Minutos después, un muchacho herido fue sacado a rastras del monte, montado en una camioneta y trasladado al hospital de Guaiparo. Llegó muerto y según los castrenses fue el pistolero que dio muerte horas antes a Rodríguez.
“Él (Rodríguez) acababa de salir de permiso y se iba unos días para Barquisimeto (estado Lara) a visitar a su familia. Lo mataron cuando buscaba una caja de cartón para guardar unas cosas… ahora tenemos que enviárselo muerto a su mamá”, lamentó un amigo del guardia nacional muerto.
Un abatido y dos arrestados
El sujeto abatido fue identificado como Francisco Salazar Keivy, de 24 años de edad y apodado el Wilo. Recibió un disparo de fusil Kalashnikovs AK-103 en el pectoral izquierdo. En la zona donde resultó abatido quedó una pistola que fue colectada por el Cicpc.
Durante el despliegue también fueron detenidos Javier Vidal y Edward Antonio Hernández. Ambos jóvenes fueron sacados a golpes de una casa y montados en una patrulla de la Guardia Nacional Bolivariana. Esta acción causó la ira de la comunidad, quien salió en defensa de los apresados.
“Ellos no tienen nada que ver en ese problema. Ellos estaban en la casa cuando ellos (los funcionarios de la GNB) entraron a darle golpes a todo el mundo y a llevárselos. Luego aparecieron hospitalizados en Guaiparo por la paliza que les dieron”, señaló Angie Hernández, hermana de Edward.
Denunciaron además que las comisiones cometieron otros atropellos contra los residentes, a quienes insultaron y golpearon durante la incursión. El reportero gráfico de El Diario de Guayana fue pateado por un uniformado cuando apresaban a Javier y a Edward.
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“Algo raro pasó ahí”
El Eje Contra Homicidios del Cicpc aún investiga las condiciones bajo las que fueron asesinados José Ramón Vicencio, funcionario de la PEB, y Luis Lozada Barrera, sargento mayor de tercera de la GNB.
“Algo raro pasó ahí”, aseguran desde el cuerpo detectivesco sobre el crimen ocurrido durante la mañana de este lunes en la calle Roraima del barrio Las Malvinas, en San Félix. Se refirieron a que ambos funcionarios estaban haciendo un “trabajo de inteligencia” por su cuenta.
Sobre el homicidio, lo único que tienen confirmado es que el malhechor iba con ambos funcionarios dentro del Mazda Allegro, color verde, que conducía el policía regional y que ambos fueron despojados de sus armamentos. “Se rumora que los mataron gente de la 46 (UD-146) y de la 45 (UD-145)”, revelaron.
Desde el Cicpc aún no descartan la posibilidad de que Lozada estuviera ayudando a Vicencio en la búsqueda de los delincuentes que hace más de una semana tirotearon con un Fusil de Asalto Ligero (FAL) la casa de la madre del PEB, ubicada en la UD-146.
