La tendencia a estar sentado frente a un computador en la oficina o a un televisor en casa nos ha habituado a una vida sedentaria a la que se le van sumando trastornos de salud y algunos “cauchitos”. Pero lo dramático comienza cuando al consultar al médico, éste indica una variedad de medicamentos que no siempre logran controlar las dolencias y peor aún, encasilla al paciente en el renglón de “enfermo”.
Por otro lado hay personas que deciden hacerse un cariñito y acuden a las terapias estéticas donde dejan por sentado desde un principio que pueden llegar a someterse a una dieta y a todos los tratamientos para definir la figura, incluso quirúrgicos, pero HACER EJERCICIO, jamás.
Frases tales como: “Yo no nací para hacer ejercicio”, “Pero, si soy flaca ¿Por qué debería hacer ejercicio?”, “Es que sólo tengo un rollito ¿realmente necesito entrenar?”, son las que más escucho en la consulta, así como: “No puedo hacer ningún deporte porque estoy enferma”, “me duele todo”, etc. Lo que estas personas no se dan cuenta es que toda la inversión realizada para modificar su imagen o su salud se pierde porque ven sólo resultados parciales y terminan abandonando cualquier tratamiento indicado, lo que conlleva a un incremento en los riesgos de morbi-mortalidad acompañados de una autoestima cada vez más baja.
En la búsqueda de la “píldora mágica” que resuelva la mayoría de las enfermedades de esta era, con mínimos riesgos, económica y accesible surge un grupo de especialistas de la salud, avalados por el American College of Sports Medicine, con el nombre de EXERCISE IS MEDICINE, que además de crear pautas para recetar el ejercicio a personas sanas o enfermas como si fuese un medicamento para disminuir un sinnúmero de enfermedades crónicas no transmisibles, han dado la vuelta a los cinco continentes para certificar a profesionales de la salud y el deporte para conformar equipos que prescriban al igual que ellos, el ejercicio sin riesgos de lesiones.
En Venezuela, el pasado 19 de octubre del 2012 tuvimos la oportunidad de recibir la certificación un reducido grupo de médicos de diversas especialidades que quedamos comprometidos a ser voceros de tan fantástica medicina.
Cómo iniciar el ejercicio
Estamos acostumbrados a comenzar la actividad física sin hacer un chequeo médico previo, ya que hasta hace poco a los médicos no nos preparaban para recetar el ejercicio de forma personalizada. Sin revisión física previa hay probabilidades de que aparezcan las lesiones, ya que puede que la persona no esté cumpliendo con la actividad adecuada para su actual condición. Por lo tanto, sólo un especialista puede indicar si la persona está apta para realizar actividades con o sin supervisión de un entrenador y debe dar las pautas de cómo realizar dicha actividad, hacer un seguimiento y fijar metas según lo que se quiera lograr.
En particular, me parece fabulosa esta visión para la Medicina Estética, como especialidad abocada a la aplicación de técnicas mínimamente invasivas para la restauración, mantenimiento y promoción de la belleza y el bienestar de los individuos. Usualmente los Médicos Estéticos recibimos en consulta pacientes obesos y también un buen número de aquellos que sin estar gordos, quieren adelgazar la panza, las revolveras o algún rollito focalizado. Más allá de las técnicas que involucran medicamentos, dietas y máquinas de tecnologías recientes, la certificación EXERCISE IS MEDICINE me permite recetar la actividad física con criterio médico-deportivo para estos casos, generalmente complicados con alguna otra dolencia.
Los beneficios del ejercicio
Podemos dividirlos en dos tipos: preventivos y curativos.
Preventivos:
- Prevención de Cáncer de cólon, próstata, útero y mama.
- Disminuye el riesgo de sufrir de Infartos, Hipertensión arterial, Ateroesclerosis, accidentes cerebro vasculares y embolismos.
- Aminora el riesgo de caídas y fracturas, a predominio en personas mayores, así como Osteoporosis.
- Previene la Diabetes tipo II, Hiperinsulinismo, Dislipidemias (trastornos del colesterol y triglicéridos), Síndrome metabólico.
- Evita los síntomas de la Menopausia, así como las molestias menstruales.
Curativos:
- Disminuye el consumo de medicamentos para controlar la Diabetes, Dislipidemias y otras enfermedades.
- Actúa como antidepresivo y ayuda a controlar las adicciones.
- Disminuye el riesgo de mortalidad hasta 5 veces en personas con enfermedades cardíacas.
- Ayuda a combatir el insomnio.
- Disminuye el peso y las medidas, por lo que reduce el riesgo de sufrir las consecuencias de la obesidad.
- Disminuye las dolencias musculo-esqueléticas.
- Mejora nuestro estado anímico.
- Disminuye el período de convalecencia en pacientes hospitalizados.
Tomando en cuenta estas ventajas, es posible decir que el ejercicio es “el medicamento” que previene un lote de enfermedades crónicas, hace lucir bien y tener dulces sueños a quienes lo practican. Si es así ¿por qué no decidirse a hacer ejercicios?
Carmen Beltrán – médico estético