El viejo conflicto actualmente revivido, entre los propietarios de un terreno ubicado en La Boyera, quienes aspiran construir en él una clínica, y los vecinos que se oponen al proyecto, debería ser sometido a una consulta pública entre los habitantes de El Hatillo, según la opinión del presidente de la Comisión de Urbanismo, Salud y Ambiente (CUSA) de Concejo Municipal de esta jurisdicción, concejal Hector Catalán.
Desde la avenida uno de La Boyera, en El Hatillo, el concejal Catalán, precandidato a las elecciones municipales de este ayuntamiento, rechazó la forma como se ha manejado, desde el punto de vista legal, los derechos que se le otorgaron a los propietarios del terreno de esta zona que afecta a sus residentes, e indicó que esta disputa nace en el año 1996, cuando se aprobó una solicitud de área asistencial para un espacio en el que sus propietarios pretenden construir una clínica. Desde ese entonces –agregó- vecinos del sector se activaron para rechazar tal proyecto y el Concejo Municipal anuló el acuerdo, lo cual generó la disputa legal entre vecinos y propietarios del terreno.
Precisó el edil que los derechos originales, los cuales fueron anulados por el Concejo Municipal a los propietarios del terreno, fueron recientemente restituidos a través de un amparo cautelar, dando pié a que “la disyuntiva volviera a la palestra pública, debido a que la resolución a este conflicto ha sido obligación expresa del gobierno municipal que preside la alcaldesa Myriam Do Nascimiento, que no termina de resolver este problema”.
Del mismo modo, Catalán afirmó que su planteamiento en reuniones dentro de la Comisión de Urbanismo, ha sido la de ajustarse al ordenamiento legal y llegar a un acuerdo entre el Concejo y la Alcaldía “a los fines de que se permute el terreno con un espacio que pueda proveer el municipio, que tenga mejores condiciones de ubicación y que no esté en el corazón de un área residencial”, puntualizó.
Asimismo, resaltó que si bien es cierto que el municipio necesita un centro asistencial, los permisos deben ser analizados entre las partes a través de una mesa de diálogo para evitar que un sector sea beneficiado y otros afectados. “Nosotros debemos de proceder sentados con los privados, para que ellos acepten una permuta de un terreno municipal que este en una vía principal y que no afecte la calidad de vida de los habitantes del sector, en este caso de la avenida uno de La Boyera”, señaló Catalán.
Comunicaciones CUSA