Dos guepardos reales, de los que se calcula que existen solo un par de docenas de ejemplares en cautividad, nacieron el 6 de enero en el zoológico tokiota de Tama, confirmó hoy a Efe una portavoz del parque.
Los dos ejemplares, que a causa de una mutación genética se caracterizan por que las manchas de su piel confluyen en líneas longitudinales sobre el lomo, forman parte de una camada de 5 cachorros, tres de los cuales nacieron con dibujos moteados normales.
Los dos guepardos reales, un macho y una hembra que aún no tienen nombre, pesan actualmente en torno a 1,5 kilos, explicó la portavoz del zoológico, que afirmó que probablemente se convoque un concurso para bautizar a los cachorros.
El zoo, situado en la localidad de Hino (distrito metropolitano de Tokio), tiene previsto comenzar a mostrar al público, tanto a la pareja de guepardos reales como a sus tres hermanos, en torno al mes de marzo, cuando el clima sea más cálido, dado que estos animales son muy sensibles al frío.
La madre, un ejemplar de 9 años llamado Sumire (un tipo de violeta japonesa) y traído de Sudáfrica, ya dio a luz hace dos años a un guepardo real hembra llamada Nadeshiko (otra flor nipona), por lo que se cree que es portadora del gen recesivo que está detrás de este peculiar pelaje, pese a ser un ejemplar moteado normal.
El zoo de Tama, donde también nacieron en octubre de 2011 otros dos guepardos reales llamados Ibuki y Woshren, es el único de Japón que posee estos extraños felinos. EFE