El venezolano Félix Hernández está a punto de convertirse en el lanzador mejor pagado en la historia de las Grandes Ligas de béisbol, pero una de las condiciones para hacerlo es no representar a su país en el Clásico Mundial de marzo próximo.
Medios de prensa estadounidense han manejado con insistencia en los últimos dias que el diestro Hernández podría pactar una extensión de contrato con los Marineros de Seattle por la cifra récord de 175 millones de dólares.
Pese a que, según reporte del sitio de Ligas Mayores MLB.com, tanto el agente de Hernández como los Marineros han insistido en que la negociación aún no está concretada.
“Aún no tenemos un acuerdo, pero vamos avanzando en eso. En estos momentos tenemos cubierto casi el 70% del contrato”, dijo a la cadena ESPN Wilfredo Polidor, de la Agencia Octagon que representa a Hernández.
Los lanzadores y receptores de los Marineros deben presentarse el martes en el campo de entrenamiento del equipo en Peoria, Arizona, y se espera que Hernández este en ese grupo, luego de anunciar el viernes que no podría jugar por Venezuela en el Clásico Mundial.
Polidor le dijo a ESPN que Hernández llamó al mánager de Venezuela Luis Sojo con “mucho dolor en su corazón” para decirle que no podría lanzar en el Clásico.
“A pesar de que no es fácil perder el as antes de comenzar un evento, Sojo entiende que en este momento Félix está pensando en su futuro y el futuro de su familia”, acotó Polidor.
El lanzador, de 26 años de edad, dio la primicia la noche del viernes en una serie de mensajes en su cuenta de Twitter, en los que pidió disculpas a los fanáticos venezolanos, y “comprender y respetar” su decisión de no integrar la selección.
De concretar el pacto con los Marineros, Félix Hernández superaría el actual contrato récord de un pitcher que tiene el zurdo C.C Sabathia con los Yankees de Nueva York, por 161 millones de dólares.
Hernandez ha jugado toda su carrera con los Marineros desde su debut en el 2005, acumulando estadísticas globales de 96 victorias con 72 derrotas, 3,17 promedio de carreras limpias por juego y 1.438 ponches.
Con los Marinos tiene dos grandes momentos poco usuales en el béisbol: el es el primer pitcher de la franquicia en batear un gran slam (jonrón con bases llenas), el 23 de junio de 2008 frente a los Mets de Nueva York, y el primer venezolano en lanzar un juego perfecto, el 15 de agosto de 2012, contra los Rays de Tampa Bay.