La prohibición total de la venta de cosméticos en cuya elaboración se ha experimentado con animales entró hoy en vigor en la Unión Europea.
“La entrada en vigor hoy de la prohibición total de comercialización es un mensaje claro sobre la importancia que atribuye Europa al bienestar de los animales”, señaló el comisario europeo de Salud, Tonio Borg.
La Comisión Europea (CE) también se comprometió, según un comunicado, “a seguir apoyando el desarrollo de métodos alternativos y a trabajar con otros países para que adopten el enfoque europeo” para los productos cosméticos.
La experimentación con animales en la UE fue prohibida en 2004 para los productos cosméticos, mientras que la misma interdicción se aplicó en 2009 para los ingredientes cosméticos.
Aun así, en lo que se refiere a las consecuencias más complejas para la salud humana, tales como la toxicidad por administración repetida o los problemas en la función reproductora, la fecha se amplió hasta el 11 de marzo de 2013.
En la comunicación adoptada hoy, la Comisión confirmó su compromiso de respetar el plazo fijado por el Consejo y el Parlamento en 2003, de manera que la prohibición se ha hecho extensiva desde hoy a todos los ámbitos de la cosmética.
Sin embargo, el Ejecutivo comunitario recalcó que la mayoría de los ingredientes utilizados en cosmética también pueden encontrarse en medicinas, detergentes, comida o pinturas que no están sujetos a la misma prohibición.
De este modo, estos componentes podrían utilizarse en cosméticos aunque hubieran sido probados en animales, puesto que los resultados se lograron de acuerdo a la legislación que se aplica a esos otros productos industriales.
En este sentido, la jefa de la unidad de Cosméticos de la Dirección General de Salud y Consumidores de la CE, Sabine Lecrenier, indicó que la prohibición concierne exclusivamente al sector de la cosmética y que la Comisión todavía no se ha planteado hacerla extensiva a otros ámbitos.
Por el momento, todavía no existen métodos alternativos que sustituyan todos los ensayos con animales, por lo que el Ejecutivo comunitario insistió en que seguirá promoviendo la investigación en este campo, a la que ya asignó 238 millones de euros entre 2007 y 2011.
Aunque existen procedimientos alternativos como reconstrucciones de piel humana para probar si un ingrediente puede causar irritación cutánea, la experimentación sobre efectos en la salud humana que implican a todo el organismo todavía debe avanzar todavía más.
La CE descartó que esto vaya a poner en peligro la seguridad de los consumidores, ya que no se utilizarán ingredientes sobre los cuales no se tenga suficiente información debido a que no se permita la experimentación animal ni haya otros métodos disponibles.
Por su parte, todos los cosméticos que fueron ensayados con animales en el pasado pero que ya están en el mercado no estarán afectados por la nueva prohibición.
Además, los resultados de esas pruebas podrán seguir utilizándose para la elaboración de nuevos productos, señaló la CE.
En lo que se refiere a la importación de cosméticos de terceros países, éstos sólo podrán comercializarse en la Unión si los resultados sobre la seguridad no se han realizado sobre animales, aunque para la venta en esos países hayan podido ser ya probados sobre animales. EFE