Nadie puede negar que Kobe Bryant, a sus 34 años de edad, vive una segunda juventud. El líder de Los Ángeles Lakers es el alma del equipo y de no ser por él la lucha por los play-off ya se hubiera acabado en el conjunto de L.A., destaca Infobae.
Sus promedios están al nivel de la temporada 2007/2008 cuando fue designado MVP de la NBA: 28,3 puntos, 6,3 rebotes, 5,4 asistencias y 1,8 robos con un 45,9% en tiros de campo en 38,9 minutos.
La clave de su plenitud física de Kobe reside en una dieta equilibrada y estricta además de un mayor cuidado físico.
En el caso de Kobe existe un gran paralelismo: “He dejado de comer dulce y vigilo todo lo que no sea necesario. Se trata de encontrar un balance y un equilibrio aunque no quiero volverme loco”
La estrella de los Lakers ya perdió 7 kilos antes de los Juegos Olímpicos de 2012, para intentar reducir el impacto sobre sus rodillas y ha seguido hasta ahora con su estricta dieta.
“Hay un alto nivel de sacrificio, pero para mí merece la pena. Estamos acostumbrados a comer lo que sea y cuando sea. Un cambio en este apartado es un cambio en tu estilo de vida y no es fácil”, explica.
Principalmente, abandonó las hamburguesas de restaurantes de comida rápida, y la carne roja ha dejado de estar en su menú al igual que el azúcar y las galletas. “Básicamente ahora como lo que tu madre te dice de pequeño que tienes que comer”, bromeó Kobe.