Julio de 1988. Una de las súper modelos más famosas del mundo decidía mostrarse “como Dios la trajo al mundo” en la famosa revista de conejito.
Estas imágenes capturadas por el lente de Herb Ritts de Cindy Crawford para Playboy, dieron la vuelta al mundo y se incrustaron en la memoria de jóvenes, no tan jóvenes y mujeres por igual.