La semana pasada se dio a conocer que un grupo de artistas venezolanos apoyarían la candidatura de Nicolás Maduro y a la revolución, en un acto que luego sería televisado los actores, actrices y animadores mostraron su apoyo al proceso.
En una país democrático esto es un acto totalmente normal, que los ciudadanos muestren sus inclinaciones políticas de manera publica y sin que haya ninguna penalidad por eso, sin embargo el uso de vehiculos oficiales para actos políticos es totalmente reprochable y digamos casi “anti-revolucionario”.
En las imagenes vemos al grupo de artistas siendo transportados a actos proselitistas en un vehículo de la Polícia Nacional Bolivariana, sabemos que las más recientes campañas electoreles han estado empañadas de irregularidades y abusos por parte del gobierno, los artistas que ahora acompañan al gobierno, quizás no muy duchos en la política y en leyes electorales y de servicio público desconocen que el uso de estos vehículos constituyen una transgresión a la ley por parte del gobierno al cual ellos apoyan. Por ende sus inicios en la militancia de la izquierda ya esta plagada de vicios y abusos al patrimonio público.
Fotografías cortesía de Analisis24
Lo otro y no menos importante es que los artistas deberían estar más cercanos a la gente y más los que hacen llamarse revolucionarios. Recibir tratos y mimos VIP con los brazos abiertos no es lo que se espera de un socialista; por lo contrario, trasladarse en metro es muy bien visto.