La paralización de la actividad productiva y económica del eje fronterizo por causa del cierre de los puentes internacionales de San Antonio y Ureña, causará pérdidas económicas superiores a los 500 millones de bolívares, estimó el presidente de la Cámara de Industria y Comercio de Ureña, Isidoro Teres. lanacion.com.ve
“Evidentemente que son perjuicio y consecuencias de mucha naturaleza, no solamente la pérdida económica por la disminución de la actividad productiva. Nosotros calculamos que en el eje fronterizo San Antonio Ureña, por los seis días de paralización, las pérdidas económicas van a superar las 500 millones de bolívares, y eso se agrega a las dificultades diarias por los cortes de energía eléctrica, dificultades para la obtención de materias primas”.
“Es toda una cadena de hechos adversos que viene a perturbar y disminuir el producto interno bruto del Táchira, porque no es solamente el sector productivo el que se está viendo afectando, también el sector servicios, que en el estado es uno de los rubros más importantes”, agregó el presidente del gremio.
El cierre de la frontera ejecutado por el Gobierno nacional, como medida de seguridad por las elecciones presidenciales de este domingo, ha causado la desolación del comercio, la industria y las empresas prestadoras de diferentes servicios de San Antonio y Ureña. Las industrias están paralizadas por la alta dependencia que tienen de los trabajadores colombianos, quienes durante estos días no han podido cruzar la frontera para venir a trabajar.
Dijo que la cuantificación que están haciendo es solamente la referida a las pérdidas directas de los sectores productivos y de servicio de la frontera, pero no han cuantificado las pérdidas del comercio binacional que fluye entre Colombia y Venezuela. Ahí se está causando pérdidas a ambos lados por la paralización de las operaciones de importación y exportación.
Teres agregó que ven con mucha preocupación que, por un lado, “se plantea relanzar, potenciar la producción de los municipios fronterizos y, por otro lado, se le paraliza con el cierre de la frontera, por seis días, algo que es inaudito. Evidentemente que las autoridades no piensan en las consecuencias económicas y sociales. Además, ese cierre causa un problema humanitario, porque hemos podido conocer de muchos casos de gente con problemas de salud o que requieren tratamiento médico, parientes de personas fallecidas, estudiantes, ambulancias, pasajeros en tránsito, que no han podido cruzar la frontera”.
El cierre del paso por los puentes ha truncado la vida normal al ciudadano de frontera, sin medir ninguna consecuencia. “Eso realmente es algo que lo tendrán que explicar mejor las autoridades, porque no entendemos cuál sería la razón poderosa para paralizar durante seis días a una población que, por la parte venezolana, es de más de 200 mil personas, quienes tienen una incidencia directa con la parte colombiana”, dijo finalmente.