Los zulianos se encomiendan a Dios. No creen en planes de seguridad ni visitas oficiales ni presencia policial en las avenidas. La violencia -dicen- no la para nadie. Abril, que recién termina, es el mes más violento del año y es igual de violento que abril del año pasado. laverdad.com / Juan José Faría
La visita de Nicolás Maduro y todo su tren ejecutivo no mermó la lluvia de balas. Al contrario, durante el fin de semana que estuvo en Zulia, se registraron 32 asesinatos, el período más violento del mes. Abril cerró con 120 decesos.
La nueva gestión gubernamental prometía la no escatimación de apoyo por parte del Gobierno nacional. Pero al llegar la revolución al estado Zulia, solo censuraron las versiones oficiales de los asesinatos. Desde el 1 de enero hasta ayer mataron a 425 personas. Durante el mismo período, del año pasado, asesinaron a 422 personas.
Lo más destacado es que para abril del año pasado, los miembros de la Policía Nacional se formaban académicamente. Ahora están en la calle y su presencia no ha bajado el índice de criminalidad.
Carolina Márquez, estudiante universitaria, considera que la situación empeora cada día. “No nos damos cuenta, pero solo vemos que antes decíamos que tal sector era peligroso, ahora le tenemos miedo a cualquier calle. Nadie está a salvo. La cosa cada vez se pone peor”.
En los 32 asesinatos que ocurrieron el fin de semana pasado, actuaron al menos 50 personas -incluyendo una pandilla que mató a dos y violó a una mujer- y dispararon más de 100 municiones. La mayoría de los cuerpos presentó al menos tres heridas de bala. Juan de La Cruz Pereira, jefe regional de la Policía científica, llegó al Puerto de Maracaibo cuando el ministro Rodríguez Torres -Interior y Justicia- presentó el alijo de droga incautado. Pero no llegó a ninguna escena del crimen.
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