Un niño de dos años ha resultado muerto y otras 17 personas heridas en un terremoto de 6,2 grados en la escala abierta de Richter que ha sacudido los puertos de Minab y Yask, en la provincia de Hormozgan, en el sur de Irán, informó la agencia local Fars.
El decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Hormozgan, Mohamad Shekari, dijo a Fars en Bandar Abbas, la capital de la provincia, que el niño falleció cuando era trasladado al hospital, al tiempo que aseguraba que los heridos fueron 17, de ellos 11 en la localidad de Bashagard, pero que no se teme por sus vidas.
El epicentro del seísmo se localizó a 57,76 grados de longitud este y 26,52 grados de latitud norte, con su hipocentro a 15 kilómetros de profundidad, en la zona de Goharan y ocurrió a las 06.38 hora local (02.08 GMT), según el Centro Sismológico Iraní.
Una veintena de réplicas, de las que la más fuerte alcanzó los 5,6 grados Richter y muchas superaron los 4, han sacudido la zona durante el día, lo que ha provocado el pánico entre los habitantes.
El pasado 9 de abril, un terremoto de 6,1 grados Richter causó 37 muertos y 850 heridos en la provincia de Busher, vecina a Hormozgan.
El 16 de abril, un fortísimo terremoto de 7,8 grados Richter sacudió la ciudad de Saravan, en la provincia suroriental iraní de Sistán Baluchistán, en un área desierta cercana a la frontera con Pakistán y a una profundidad de 83 kilómetros, lo que limitó en gran medida los daños humanos y materiales.
Según medios locales y fuentes paquistaníes, unas 40 personas resultaron muertas en Irán y otras tantas en Pakistán, aunque los datos no son claros.
Irán se encuentra en un área de frecuentes terremotos y uno de los últimos con graves efectos se produjo en agosto del año pasado, en la provincia de Azerbaiyán Oriental, donde murieron 306 personas y 4.500 resultaron heridas al registrarse dos movimientos consecutivos de 6,2 y 6 grados Richter. EFE