El secretario general de la FIFA, Jérôme Valcke, reiteró hoy que Sao Paulo será una de las sedes del Mundial de Brasil 2014, un día después de apresurar a la ciudad para que concluya las obras de su estadio a tiempo.
“No habrá Mundial en Brasil sin Sao Paulo”, afirmó Valcke en una rueda de prensa después de realizar una visita de inspección al estadio Maracaná de Río de Janeiro.
El dirigente dijo que en un plazo de 30 días se celebrará una reunión entre las cuatro partes implicadas, la constructora Odebrecht, el club Corinthians, dueño del estadio, las autoridades locales y la FIFA, en la que se “encontrará una solución”.
El ministro del Deporte, Aldo Rebelo, manifestó su “confianza” en que se llegue a un acuerdo y se termine la obra a tiempo para el Mundial.
El Corinthians alega que terminará la obra en diciembre, fecha límite impuesta por la FIFA para todas las sedes, aunque calcula que se tardarán dos meses más para instalar unas gradas temporales necesarias para albergar el partido inaugural del Mundial.
Este martes Valcke recordó que la FIFA tiene de límite hasta el próximo 1 de agosto, fecha en la que se comenzará a vender las entradas del Mundial, para hacer cualquier alteración en el calendario de partidos y no descartó quitarle el partido inaugural a la ciudad.
El responsable de la FIFA consideró hoy que todo estará preparado para la Copa Confederaciones, que comenzará el próximo 15 de junio y se realizará en seis ciudades brasileñas.
“Reconozco que los estadios se entregaron después de la fecha límite, pero antes de la Copa Confederaciones”, una competición que se celebrará “sin problemas”, según él.
Valcke calificó el Maracaná, sede de la final de la Copa Confederaciones y del Mundial, como “la catedral, la meca del fútbol” y elogió el trabajo intensivo realizado en los últimos meses para terminar las obras.
El dirigente restó importancia a que solo haya tiempo para realizar un único partido oficial de prueba en el Maracaná con el aforo completo, el próximo 2 de junio, un amistoso entre Brasil e Inglaterra.
Según Valcke, en ese partido se probarán todas las infraestructuras y la operación del estadio, para que esté preparado para el primer partido de la competición, el México-Italia del 16 de junio.
El secretario de la Presidencia de la gobernación de Río de Janeiro, Regis Fichtner, explicó que las obras en el estadio y sus alrededores se extenderán hasta el próximo día 24, fecha en la que será entregado a la FIFA.
A partir de entonces, solo quedará pendiente la realización de algunos “ajustes” y el montaje de algunas instalaciones temporales, según Fichtner. EFE