Son totalmente falsas las afirmaciones del Presidente Nicolás Maduro de que conoce las identidades de los 900 mil electores militantes del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) que votaron por el ex candidato Henrique Capriles, las cuales fueron pronunciadas este jueves 16 de mayo en el estado Barinas.
Para Súmate estas infundadas declaraciones pudieran tener el propósito de atemorizar a los empleados públicos y beneficiarios de las misiones, con el fin de torcer su voluntad en los próximos procesos electorales; por lo cual las mismas deben ser rechazadas y desmentidas enérgicamente por el Consejo Nacional Electoral, poder del Estado que hasta la fecha ha guardado silencio.
Esta ONG considera que el CNE debe iniciar la apertura de una solicitud de investigación, por cuanto estas declaraciones, en la persona del Presidente de la República, podrían constituir un delito electoral, al intentar sembrar la duda sobre el secreto del voto, que es uno de los elementos constitutivos, junto a la libertad – universalidad y personalización, del derecho al sufragio establecido en el artículo 63 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, y que pudieran atentar también contra lo dispuesto en el artículo 126 de la Ley Orgánica de Procesos Electorales (LOPRE).
Artículo 63 de la CRBV: El sufragio es un derecho. Se ejercerá mediante votaciones libres, universales, directas y secretas. La ley garantizará el principio de la personalización del sufragio y la representación proporcional.
Artículo 126 de la LOPRE: Ninguna persona puede ser obligada o coaccionada bajo ningún pretexto en el ejercicio de su derecho al sufragio.
Súmate reitera que la actual plataforma automatizada de votación del CNE garantiza el secreto del voto, por lo cual no hay intimidación que valga contra la decisión libre y soberana de los electores. Agrega que el soporte para esta aseveración es producto de los resultados arrojados de las revisiones técnicas de las máquinas de votación y captahuellas. Al mismo tiempo, esta ONG lamenta que estos resultados positivos de las revisiones técnicas no se traduzcan en confianza hacia el CNE, debido a que en su desempeño tiene una manifiesta parcialidad política, y ello no solo a que la mayoría de su directorio tiene afinidad con el PSUV sino a su incapacidad para detener el ventajismo e intimidación del oficialismo en el despliegue de recursos públicos en la campaña y al hecho de haber permitido la comisión de miles de irregularidades en las elecciones presidenciales del 14 de abril de este año, que pudieron haber afectado el resultado electoral debido a la estrecha brecha de votos entres los dos aspirantes al cargo de Presidente de la República.