Los equipos de rescate recuperaron otros cuatro cuerpos de una galería subterránea que se vino abajo en una mina de oro y cobre gigantesca en Indonesia, con lo que aumentó a 21 la cifra de muertos confirmados, dijeron el martes funcionarios de la mina de propiedad estadounidense.
Se cree que otros siete mineros están enterrados bajo los escombros.
La tragedia ocurrió la semana pasada en el centro de entrenamiento subterráneo Big Gossan, en la mina PT Freeport Indonesia, cuando 38 trabajadores aprendían técnicas de seguridad. Diez mineros heridos fueron rescatados.
Un comunicado de la compañía dijo que continuaban los esfuerzos de rescate.
El presidente indonesio, Susilo Bambang Yudhoyono, dijo que le pidió a dos de sus ministros que investiguen el accidente en persona, pero la empresa les impidió el ingreso alegando que seguían en marcha los esfuerzos de rescate.
Las actividades de extracción están suspendidas desde el accidente en la mina Grasberg, propiedad de la empresa Freeport-McMoRan Copper & Gold Inc., con sede en Phoenix, Arizona. La compañía dijo esperar que el accidente no tenga un impacto significativo en sus operaciones.
La mina Grasberg es una de las mayores productoras individuales de cobre y oro del mundo.
Más de 20.000 mineros trabajan en la mina, que en varias ocasiones ha sido blanco de ataques incendiarios, bombas en carreteras y bloqueos desde que se inició la producción en la década de 1970.
Está en las montañas remotas de la provincia de Papúa, rica en recursos pero de habitantes en la pobreza, que también es el hogar desde hace varias décadas de insurgentes separatistas de bajo nivel. AP