Vecinos de distintas parroquias del municipio Libertador se concentraron frente al Abasto Bicentenario de San Bernardino para denunciar la grave escasez de alimentos que afecta a la ciudad capital, asimismo relataron las penurias que pasan en la búsqueda de los productos de las canasta básica incluyendo largas colas y el recorrido a decenas de establecimientos. Revelaron que el motivo de este problema es la corrupción del Estado que comercia con la necesidad del venezolano y castiga al comerciante con fuertes sanciones.
Carlos Julio Rojas, coordinador del Frente en Defensa del Norte de Caracas, explicó que el hacer mercado se ha convertido para los caraqueños en un viacrucis, donde puedes perder la mitad del día en la búsqueda de los alimentos pasando por muchas calamidades. “Nuestras madres y abuelas sufren colas de dos y tres horas para comprar margarina, harina pan o papel sanitario, sin contar el recorrer muchos abastos donde casi siempre la respuesta es no hay. Esto es inhumano y atenta contra las libertades y el propio derecho a la vida”, dijo.
Rojas señaló que en los abastos y mercados se han escenificado disputas por los productos, algo que es inaudito en un país con los ingresos petroleros que tiene Venezuela, además exigió transparencia por parte del Estado en la distribución de los alimentos. “En los mercados puedes ver a la gente peleándose por un rollo de papel o una harina pan, le pedimos al ministro para la Alimentación Félix Osorio y de Comercio Alejandro Fleming cuentas claras en la administración, es inverosímil que en los comercios los estantes estén vacios y los buhoneros vendan los productos de la cesta básica al doble de su precio original. Están jugando con el bolsillo y el hambre de los ciudadanos”.
El luchador social rechazó el racionamiento que se está aplicando de facto en los abastos y mercados de Caracas, en el cual en los pocos momentos donde hay productos el ciudadano solo puede llevar dos por persona. “Entendemos que el comerciante debe distribuir de manera equitativa los alimentos, pero el responsabilidad del Estado abastecer de alimentos los venezolanos, nos solidarizamos con los zulianos que les están aplicando una libreta a la cubana para impedirles comprar la comida necesaria para sus familias. No queremos que esto llegue a la capital y por eso salimos a la calle”, acentuó.
“Mi Casa Bien Equipada se ha convertido en un nido de corrupción”
Carlos Rojas reveló que los electrodomésticos que son comercializados por el plan Mi Casa Bien Equipada no se consiguen en ningún establecimiento, convirtiéndose casi en un espejismo para la persona que quiere comprar una nevera cocina a un precio económico. “Lo que si encontramos es que empleados de estos locales bajo la mirada permisiva del Estado venden los aparatos a doble de su valor en el mercado chantajeando al consumidor, y la mayor prueba esta que al comprarlo en el mercado negro debes retirarlo en las propias oficinas estatales. Exigimos al ministro Fleming que tome cartas en el asunto”.
Por su parte Selimira Jiménez, vecina de Candelaria, relató que paso todo un día buscando en más de 20 comercios un paquete de leche y nestum para su nieto. “Los niños han tenido que pasar hambre gracias a desabastecimiento, le suplicamos al gobierno que saque los alimentos a la calle y deje de controlar afectado la salud de los caraqueños”, concluyó.
Nota de prensa/ Asamblea de Ciudadanos de la Candelaria