Panamá calificó de “contrabando” el armamento cubano no declarado descubierto en un buque norcoreano y aguardaba este miércoles la llegada de expertos de Estados Unidos y de Gran Bretaña, que deben analizarlo.
“La carga es ilícita porque no está declarada. Lo que no está consignado, aunque sea obsoleto, es contrabando”, dijo este miércoles el ministro de Seguridad y abogado especializado en temas marítimos, José Raúl Mulino.
Fotos Reuters
El 10 de julio el carguero “Chong Chon Gang”, procedente de Cuba, fue abordado antes de ingresar al Canal de Panamá rumbo a Corea del Norte, por sospechas de drogas ocultas en una carga de 220.000 quintales de azúcar, la única que figuraba en el manifiesto, según afirmaron autoridades panameñas.
Pero las requisas en el desvencijado buque, luego de superada la resistencia de los tripulantes, detectaron en un primer momento dos contenedores ocultos, en uno de los cuales habia material bélico luego identificado como un sistema de control de tiro de misiles antiaéreos.
El martes Cuba afirmó que el armamento era de su propiedad y dijo que se trata de material “defensivo obsoleto” y sostuvo que lo enviaba para reparación a en Corea del Norte.
“En la citada nave se transportaban 240 toneladas métricas de armamento defensivo obsoleto -dos complejos coheteriles antiaéreos Volga y Pechora, nueve cohetes en partes y piezas, dos aviones Mig-21 Bis y 15 motores de este tipo de avión, todo ello fabricado a mediados del siglo pasado-, para ser reparado y devuelto a nuestro país”, dijo la cancillería cubana.
Para evaluar el material, “estamos esperando que lleguen los especialistas que hemos solicitado a Estados Unidos y al Reino Unido. También una misión técnica del Consejo de Seguridad”, dijo hoy Mulino.
Naciones Unidas han impuesto un embargo al comercio de armas con Corea del Norte como parte de las sanciones por su plan de ensayos nucleares con fines militares.
“Si se confirma que el cargamento viola las resoluciones de la ONU, esperamos que el comité de sanciones del Consejo de Seguridad tome acciones rápidamente”, reaccionó el miércoles el gobierno de Corea del Sur, al felicitar a Panamá por la intercepción del buque.
Un almacenaje arcaico que desalienta las inspecciones
Entretanto en la caribeña ciudad de Colón, junto a la entrada caribeña del canal, un centenar y medio de personas continuaban la lenta tarea de extraer de las bodegas del buque casi un cuarto de millón de sacos de azúcar.
La exasperante lentiud de la tarea –que se realiza en medio de una invasión de abejas atraídas por el azúcar– responde a que los trabajos deben realizarse en forma artesanal debido al primitivo y sorprendente sistema de almacenaje que fue utilizado en Cuba.
Las bolsas fueron colocadas individualmente, mientras lo normal serìa estibarlas en pallets. Al haber sido colocadas sueltas vaciar una bodega, a juicio de expertos, demora dos dias en vez de tres horas, lo que desalienta cualquier inspección inopinada si no hay una real urgencia de verificación.
Entretanto la justicia se aprestaba a iniciar los interrogatorios a los 35 tripulantes del buque, quienes fueron llevados a Fuerte Sherman, una antigua base militar estadounidense en la època en que el canal, devualto a Panamá en 1999, estaba bajo administración de Washington.
Los tripulantes “están en plenas condiciones (…) hoy estamos mandando a médicos de medicina legal para que sean revisados medicamente. Estamos mandando también un equipo de sicólogos para que les hagan un análisis sicológico”, dijo el fiscal primero antidrogas, Javier Carballo, quien ha piloteado el caso.
El desvencijado Chong Chon Gang, un buque construido en 1979, tiene un largo prontuario internacional en cuanto a problemas de seguridad en la navegación, pero también registra al menos una inspección en Ucrania por drogas.
“Teníamos sospecha de que (el barco) tenía droga y lo trajimos a puerto y empezamos a verificar todo lo que estaba en el barco, que venía de Cuba e iba para Corea del Norte”, habìa dicho el presidente Ricardo Martinelli, un político de derecha cercano a Washington, cuando fue anunciada la detenciòn.
“Vamos a pedirle ayuda a países amigos para ver que es lo que hay en estos contenedores” porque “realmente no tenemos conocimiento de estas armas”, agregó luego Martinelli, durante una visita al barco –vetusto, oxidado y sucio–, periplo que realizó acompañado por periodistas.
El portavoz del departamento de Estado, Patrick Ventrell, declaró que “Estados Unidos apoya fuertemente la decisión soberana de Panamá de inspeccionar la nave de bandera norcoreana” y su país “está listo para cooperar”.
Por el canal de Panamá transita un 5% del comercio mundial y en la actualidad se realiza una gigantesca ampliación, que deberá estar habilitada a fines de 2014, año del centenario de la vía interoceánica.
Por el canal pueden transitar buques militares y también barcos mercantes que lleven material bélico, pero esas cargas deben ser declaradas previamente ya que requieren un protocolo especial, explicó un funcionario del canal.
Cuba es uno de los pocos países que mantienen vínculos con el régimen de Pyongyang, que está fuertemente aislado en la comunidad internacional por sus ensayos nucleares.
AFP