El onomástico del líder encuentra a sus sucesores con una calamitosa economía, pero muy firmes en lo ideológico y siguiendo a pie juntillas el testamento político, publica El País de España.
Alfredo Meza / Caracas
Ahora lo llaman “el gigante”, “el comandante supremo”, “el líder eterno”, incluso “el comandante galáctico y celestial” y se habla de él en presente de indicativo, como si nunca hubiera muerto. “El próximo 28 de julio, Hugo Chávez cumple 59 añitos”, dijo el presidente Nicolás Maduro antes de anunciar que a partir de este sábado y hasta el 4 de agosto se celebrará el natalicio del caudillo con fiestas populares y un operativo típico de los teletones latinoamericanos. Durante esa semana y las que sigan el propio sucesor podría tocar la puerta de cualquier vivienda para llevar regalos y el mensaje del comandante.
Se trata de una ofensiva, como le gusta presumir al chavismo, para glorificar todavía más al líder de la revolución bolivariana desde el púlpito del canal estatal Venezolana de Televisión (VTV). Ninguna otra vida en la historia de la televisión venezolana ha sido objeto de tan sistemático culto por parte de una dirigencia política. En la mañana del viernes 26, por ejemplo, mientras Maduro asistía en La Habana al aniversario del asalto al Cuartel Moncada, VTV dedicaba buena parte de su bloque de propagandas a recordar la obra de gobierno bolivariano en la voz del fallecido comandante. Una cuña muestra a tres jóvenes rodando sobre tres bicicletas. Al pasar frente a una pared la cámara se queda tomando una imagen de Chávez montado sobre uno de esos vehículos mientras los jóvenes salen de cuadro. Todas las piezas culminaban con un lema: “Chávez y Bolívar (Simón, el libertador) un solo corazón”.
El onomástico del líder encuentra a sus sucesores con una calamitosa economía, pero muy firmes en lo ideológico y siguiendo a pie juntillas el testamento político. Los ministros continúan cavando la zanja entre “ellos” (la oposición) y “nosotros”, reivindicando una presunta justicia divina encarnada por la revolución. Según esa cosmovisión sólo Chávez democratizó el acceso a los bienes y reivindicó a los excluidos.
Por todo eso su nacimiento es visto como una fecha patria. Su recuerdo es ya un souvenir. Su imagen se vende en tiendas de artesanías vestido con ropa de campaña y tocado con su boína roja, pero también se le recuerda en bustos colocados en lo alto de la Sierra Maestra en Cuba o en un parcelamiento de Chincha, Perú, donde ordenó construir viviendas destruidas por un terremoto con fondos venezolanos, o en Montevideo. En el estado Mérida el artista plástico Israel Linares prepara un busto de tamaño natural que será desvelado en los próximos días por trabajadores de la corporación de salud de la localidad. Y hay una estatua en uno de los jardines de un centro comercial a la vera del Paseo Los Próceres.
Aunque no ha sido revelado un programa oficial, como lo prometió en días pasados Adán Chávez, el gobernador de Barinas y hermano del fallecido líder, se esperan celebraciones espontáneas como las que pidió Maduro en días pasados “Regálenle algo a Chávez, canciones, murales. Que el pueblo se prepare para darle un regalo de patria. Chávez se ganó el cielo por sus obras en la tierra”. En el sector 23 de Enero, el fortín del chavismo, han entendido el mensaje y harán del 28 de julio una celebración especial. Juan Contreras, miembro de la Coordinadora Cultural Simón y Bolívar y director de la radio “Al son del 23” ha preparado una selección de autores muy caros para los viejos lobos de la izquierda latinoamericana. Ese domingo sonarán las piezas de los cantores populares Alí Primera, Silvio Rodríguez o Violeta Parra y las melodías de Julián Conrado, el cantante de las FARC preso en Venezuela. “El sábado en la noche habrá una obra de teatro de un grupo itinerante colombiano sobre un tema político. Será el inicio de una jornada que esperamos continuar con el lanzamiento de cohetes”, informa el dirigente.
El gobierno también planea inaugurar en los próximos días un think tank con el nombre del teniente coronel que será por su hermano Adán. A todos estos homenajes públicos, que curiosamente, en un arranque de modestia, fueron rechazados por él en una alocución el 6 de marzo de 2009, se agregan las expresiones más domésticas, pero mucho más sentidas, de sus familiares. María Gabriela, la hija más extrovertida, fue hace poco noticia por haberse tatuado la firma de su padre. Sobre el pedazo de piel morena también puede leerse: “Amor mío”. “Papá”.