Sin tener que pasar por la dolorosa aguja, se pueden adquirir online por calcomanías cuya única exigencia es adherirlas con agua a la cutícula. No sabemos si esta tendencia despuntará, pero ya se está haciendo eco en Instagram.
Si la decoración de las uñas ha sido tradicionalmente un símbolo de estatus, actualmente se han convertido en el exhibicionismo de la vena artística de cada uno. Los discretos esmaltes dieron lugar a explosiones de color donde tonalidades antes imposibles se mezclaban en estampados e intrincados dibujos. El nail art ya ha conseguido hacerse un hueco entre los tips de belleza poblando Internet con tutoriales de mani-pedis capaces de incluir encaje o motivos de lo más frikis, publica elpais.com.
Sin tener que pasar por la dolorosa aguja, se pueden adquirir online por calcomanías cuya única exigencia es adherirlas con agua a la cutícula. No sabemos si esta tendencia despuntará, pero ya se está haciendo eco en Instagram.