Madonna siempre ha sido una mujer de armas tomar, políticamente incorrecta y que se negó a dejar de sorprender a su nutrido grupo de seguidores. Ahora, la cantante se ha sumado a la tendencia «Grilzz» y se ha forrado los dientes con fundas de oro y brillantes. Es la última de las celebrities que se apunta a esta moda después de que Rihanna, Justin Bieber, Chris Brown, Kanye West o Miley Cyrus sucumbiesen a ella, publica abc.es.
Su visita a Roma para supervisar las preparativos de la apertura de su cadena de gimnasios de lujo, «Hardcandy Fitness», dejó boquiabierto a más de uno. Para el evento, Madonna optó por un minivestido negro a juego con sus medias y sus ya habituales guantes de cuero. Un look que, unido a su nueva sonrisa, hizo imposible que Madonna pasase desapercibida.
A Madonna no le va nada mal en los negocios. Su cadena de gimnasios marcha a las mil maravillas y está presente en la Ciudad de México, Moscú, San Petersburgo y Sydney. Además de la próxima apertura en Roma, la cantante tiene previsto abrir otro establecimiento en Toronto, Canadá.En definitiva, a Madonna la suerte le sonríe.
Fotos Reuters y AFP