Las autoridades de la capital peruana multarán, a partir de hoy, con unos 52 dólares a los conductores que hagan uso indebido del claxon o bocina de sus vehículos en el centro histórico, que sufre de contaminación acústica con ruidos mayores a los permitidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La municipalidad lanzó la campaña “Lima contra el ruido” con el objetivo de sancionar a los conductores que usan la bocina de forma indiscriminada en situaciones en las que no hay peligro, explicó el subgerente de Medio Ambiente de la ciudad, Gunther Merzthal, al diario La República.
El centro de Lima, donde se encuentran los principales edificios del gobierno y monumentos históricos, tiene un ruido permanente de más de 85 decibelios por el tráfico de vehículos y con el uso del claxon o bocina se incrementa a 114 decibelios, indicó Merzthal.
Sin embargo, los niveles tolerables al oído humano son de 55 decibelios, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los conductores de vehículos de transporte público suelen hacer sonar sus bocinas para atraer pasajeros en las principales avenidas de Lima o para intentar acelerar el paso de otros automóviles cuando se presenta una congestión en el tráfico.
El portavoz de la municipalidad dijo que los inspectores de la comuna estarán a cargo de la supervisión de esta campaña y detección de los infractores y que la Policía de tránsito impondrá las multas, estipuladas en el Reglamento Nacional de Tránsito.
De acuerdo con este reglamento, el uso inadecuado de la bocina es considerada una infracción leve sancionada con 148 soles (unos 52 dólares).EFE