Maduro viajó a China alumbrado por la Luna

Maduro viajó a China alumbrado por la Luna

Estados Unidos rectificó y autorizó el uso de su espacio aéreo al avión de Nicolás Maduro rumbo a China, pero no respondió a la otra acusación del presidente venezolano de negarle visas a parte de su delegación que asistirá a la Asamblea General de la ONU, reseña AFP.

La portavoz del Departamento de Estado, Marie Harf, indicó este viernes a la AFP que “Estados Unidos otorgó permiso a las autoridades venezolanas” para usar su espacio aéreo, pese a que la “solicitud no fue entregada adecuadamente”, por lo que la rectificación se realizó “en cosa de horas”.





Horas después, Venezuela admitió la rectificación de Washington.

“Este tema afortunadamente ayer (jueves) lo pudimos superar después de intensas conversaciones”, dijo desde Nueva York el encargado de negocios de Venezuela en Estados Unidos, Calixto Ortega, a la televisora oficial VTV.

Poco antes de la medianoche del jueves y sin precisar qué ruta tomaría, Maduro anunció en Twitter su partida hacia el gigante asiático: “Rumbo a China, son tiempos de cosecha en nuestra relación de patrias hermanas. Valga la fiesta de la luna para alumbrar nuestros caminos!”, escribió.

Rumbo a China, son tiempos de cosecha en nuestra relación de patrias hermanas. Valga la fiesta de la luna para alumbrar nuestros caminos!

— Nicolás Maduro (@NicolasMaduro) September 20, 2013

Maduro, que visitará por primera vez como presidente el gigante asiático entre el sábado y el próximo martes, calificó de “indignante” y “falta grave” la negativa inicial de Washington en un encendido discurso antes de partir.

“Negarle el permiso a un jefe de Estado para que sobrevuele el espacio aéreo que ellos han colonizado en la tierra de Puerto Rico (asociado a Estados Unidos desde 1952), es una falta grave”, aseguró Maduro.

Pero Harf explicó que Venezuela había solicitado la autorización del vuelo sólo con un día de anticipación y no los tres “requeridos”, además de que la aeronave no era un avión oficial venezolano.

Ortega respondió que el permiso “sí fue negado por escrito” a pesar de que “la solicitud estaba absolutamente apegada a derecho, por cuanto (…) habiendo un presidente en el avión, el avión asume la inmunidad del presidente”.

Maduro había indicado que viajaría en un “avión seguro” de la aerolínea Cubana de Aviación.

“Mudar sede de ONU”

Harf indicó a la AFP que se está analizando la otra acusación de Maduro de que el gobierno de Estados Unidos no quiere dar la visa a su ministro de la Presidencia, Wilmer Barrientos, y su jefe de seguridad, el general Manuel Bernal, que serían parte de la delegación venezolana que acudirá la semana próxima a la Asamblea General de las Naciones Unidas en Nueva York.

“Gobierno de Estados Unidos, usted está obligado a darle visa a toda la delegación venezolana, no acepto que se le niegue la visa al ministro Barrientos ni al jefe de la casa militar, ni a ningún otro miembro de la delegación”, aseguró Maduro.

Estados Unidos “no es dueño de la ONU. La ONU está en Nueva York. Bueno, tendrá que mudarse la ONU”, agregó.

Y advirtió: “Si tengo que tomar medidas diplomáticas contra el gobierno de Estados Unidos las tomaré hasta el nivel más drástico si es necesario, pero no voy a aceptar ningún tipo de agresión”.

La rectificación en principio rebajó el tono de la polémica, que amenazaba con extenderse al ámbito regional después de que el presidente boliviano, Evo Morales, pidió el jueves “una reunión de emergencia” de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) para analizar la situación y en la que, dijo, planteará “el retiro inmediato de los embajadores de Estados Unidos”.

El mandatario boliviano insistió este viernes en que coordina con sus homólogos de Argentina y Uruguay para llevar el reclamo ante la Asamblea General de la ONU.

Maduro también asistirá a la cita en la ONU, confirmó Ortega, que sin embargo señaló que le “preocupa sobremanera” que la delegación venezolana pueda hallar obstáculos al llegar a Nueva York.

Morales fue centro de una crisis diplomática internacional en julio luego de que España, Portugal, Francia e Italia le negaran su espacio aéreo, ante sospechas de que trasladaba al exanalista de inteligencia Edward Snowden, requerido en Washington por espionaje.

“Primero fue con Bolivia, ahora con Venezuela. ¿Qué pretenden? ¿Poner en riesgo la amistad entre los pueblos y la paz en el mundo?”, reaccionó en Twitter el canciller de Ecuador, Ricardo Patiño, cuyo gobierno es aliado de Caracas y La Paz.

Estados Unidos y Venezuela, sin embajadores en los respectivos países desde 2010, han mantenido tirantes relaciones desde el gobierno del fallecido mandatario Hugo Chávez (1999-2013).

El 20 de julio Venezuela dio por terminado el acercamiento acordado en junio debido a críticas a Venezuela de la ahora embajadora de Washington ante la ONU, Samantha Power.

Pese a las tensas relaciones, Estados Unidos es el primer cliente del petróleo de Venezuela, principal productor de crudo sudamericano.

Venezuela-China

Maduro prevé reunirse con su homólogo chino, Xi Jinping, y el primer ministro, Li Keqiang, con miras a fortalecer la cooperación con el gigante asiático, segundo socio comercial de Venezuela, iniciada durante el gobierno de Chávez.

“Es una alianza entre una gran nación del mundo, una gran potencia sobre la base del respeto y la igualdad. No es una relación como otras potencias como los Estados Unidos establecen, relaciones imperiales de saqueo”, defendió el gobernante.

Venezuela y China, con un intercambio comercial de más de 20.000 millones de dólares en 2012, mantienen millonarios convenios en áreas como energía, industria, tecnología y vivienda. Además Pekín es una importante fuente de financiamiento para el país sudamericano.

El miércoles, el ministro de Petróleo y Minería, Rafael Ramírez, anunció un nuevo préstamo del Fondo Chino-Venezolano por unos 5.000 millones de dólares acordado durante la visita que realiza a Pekín para preparar la llegada de Maduro.

Venezuela vende 640.000 barriles diarios de petróleo a China, de los cuales 264.000 se destinan a pagar la deuda de Caracas por créditos que Pekín le ha otorgado en los últimos años.

AFP