Su baile de 15 años no solo significó su presentación a la sociedad; sino también su inicio en la vida sexual. No le habían dado su diploma de bachiller cuando Andrea se enteró que estaba embarazada. Se graduó del liceo, pero no ingresó a la universidad. Su nueva profesión sería la de ser madre. Esta historia se repite muy a menudo en Venezuela, que ocupa el primer lugar de Suramérica en número de embarazos no planificados en adolescentes, según la Organización de Naciones Unidas (ONU), reseña el diario La Verdad.
El problema se considera de salud pública. Y es que una de cada tres adolescentes queda embarazada en su primera relación sexual; y una de cada cinco queda encinta en un período menor a los seis meses después de su primera vez. De esta manera, una de cada cinco chicas habrá tenido un hijo antes de los 20 años.
Para Adelvys Nieto, presidente de la Sociedad Venezolana de Ginecología Infanto Juvenil, el desconocimiento no es la causa de este fenómeno, ya que 90 % de las jóvenes sabe acerca de los métodos anticonceptivos, pero solo una de cada 10 los usa.
De acuerdo con Dámaso Castellanos, director de Atención a Madres, Niños, Niñas y Adolescentes del Ministerio de la Salud, 23 por ciento de las 850 mil embarazadas que se realizan en el año el control prenatal en instituciones públicas son adolescentes, lo que equivale a 195 mil 500 jóvenes.
Problema de valores
La disminución de centros que impartan orientación sexual y la falta de un proyecto de vida han contribuido, esencialmente, al aumento de la cantidad de mujeres que quedan en estado de gestación antes de cumplir los 19 años; explica Aura Rincón, directora del Programa Salud Sexual y Reproductiva en Zulia.