Las principales extinciones masivas de especies en la Tierra ocurrieron durante el paso del Sistema Solar a través de los brazos espirales de la Vía Láctea, según un estudio publicado hoy en Australia.
La investigación, encabezada por Jonti Horner de la Universidad de Nueva Gales del Sur, determinó la posición del sol durante los diversos períodos de extinción y hallaron que la mayoría de ellos coincidieron con el paso del Sistema Solar por los brazos galácticos.
“No queremos decir que cada extinción masiva este causada por el movimiento de traslación por el brazo espiral”, dijo Horner, que señaló otros factores que contribuyeron a la desaparición de especies como las glaciaciones o inundaciones basálticas, pero “es una señal tentadora”.
El Sol pasa hasta un 60 % de su viaje de 220 millones de años alrededor de la Vía Láctea en los brazos espirales, explicó Horner, coautor del estudio que busca reforzar la hipótesis de que las extinciones masivas en la Tierra no han sido fortuitas.
Los brazos espirales son regiones de la galaxia que tienen una densidad mayor que la media y donde hay una mayor presencia de estrellas, gas molecular y nubes de polvo.
“El aumento del número de estrellas que el Sol encuentra en su desplazamiento a través del brazo galáctico podría causar perturbaciones en la gravedad, enviando cometas de la nube de Oort hacia el centro del Sistema Solar, donde se encuentra la Tierra”, dijo Horner a la cadena ABC.
La nube Oort, que se encuentra en los límites del Sistema Solar, es una reserva hipotética de cometas cuyas colisiones con la Tierra son una de las posibles causas de las extinciones masivas junto a las grandes erupciones volcánicas de magma y las avalanchas de los períodos de glaciación.
Horner indicó que actualmente se han registrado solamente 182 cráteres causados por el impacto de cometas y asteroides, aunque la mayoría de las huellas de estos encuentros han sido borrados por fenómenos climatológicos y geológicos.
La investigación apunta que, si bien las inundaciones basálticas y las glaciaciones ocurren de forma esporádica y aleatoriamente, las extinciones masivas podrían responder a un patrón específico.
“La coordinación del tiempo nunca será perfectamente precisa, pero cuando se observan los datos, siempre persiste la duda de que las extinciones no se distribuyeron de forma totalmente aleatoria a través del tiempo, sino que fueron vagamente periódicas”, apuntó Horner.
Las seis principales extinciones ocurrieron durante el Cámbrico Tardío, hace unos 488 millones de años; el Ordovícico Tardío (455); el Devónico (375); el Pérmico-Triásico (251); el Triásico-Jurásico (200) y el Cretácico-Terciario (66).
Recientemente también se han identificado casos de extinciones masivas de especies hace 415, 322, 300, 145 y 33 millones de años.
“Si imaginamos por un momento que la única causa de la extinción está relacionada con el impacto de cometas, entonces es más probable que haya una colisión cuando se pasa por el brazo galáctico y el aumento de la densidad envía cometas hacia la Tierra”, concluyó Horner. EFE