Las aerolíneas que operan en Venezuela están transfiriendo información a los organismos de control del país de los pasajeros que efectivamente salen del país para evitar el fraude de quienes solicitan divisas fingiendo viajar y luego no lo hacen.
“Estamos transfiriendo información de los pasajeros que realmente están saliendo del país, estamos transfiriendo la información de los boletos que realmente se están utilizando en el país”, indicó el presidente de la Asociación de Líneas Aéreas en Venezuela, Luis Semprún, al canal privado Globovisión.
Semprún indicó que esa información se le está proporcionando a la Comisión de Administración de Divisas (Cadivi), al Instituto Nacional de Aviación Civil (INAC), a la Policía Científica y a la Fiscalía, entre otros organismos.
En Venezuela rige desde 2003 un sistema de control de cambios que impide el libre acceso a la divisa extranjera. El Estado monopoliza la distribución y asignación de esas divisas con base en un engorroso sistema administrativo y bajo una serie de supuestos, entre los que se cuentan, los viajes al exterior.
La enorme diferencia que hay entre el valor del dólar oficial (6,3 bolívares) y el ilegal paralelo que puede más que sextuplicar ese precio ha hecho que aumenten de manera exponencial los casos de personas que fingen viajar al exterior para obtener divisas que después revenden.
Esta situación ha hecho disparar los precios de los vuelos y hacer poco menos que una quimera lograr pasaje para cualquier lugar del mundo en meses.
Semprún indicó que ahora “al cruzar esa información en este momento estos organismos (…) ya tienen plenamente identificados quiénes son las personas que están viajando y quienes no y ellos tomarán las acciones correspondientes”.
El responsable del gremio aeronáutico indicó que “no hay cupo porque estas personas que organizadamente (…) han colapsado las líneas aéreas; las colapsan y posteriormente no viajan”, señaló.
“Hemos llegado a un punto donde en este momento todas esas personas que están haciendo (fraude) les puedo decir que se les acabó el negocio”, dijo.
Señaló que el aumento de los precios, que pueden ser de más de 3.000 dólares para trayectos cercanos de tres o cuatro horas, se debe a que los lotes más baratos de boletos aéreos son comprados de forma inmediata por quienes especulan con este mecanismo de obtención de divisas.
El Gobierno está evaluando diversos mecanismos para evitar este tipo de fraude, que se presenta en múltiples versiones. EFE