Lapatilla
La ministra Iris Varela nunca aceptó la existencia del dominio criminal dentro de la cárcel de Sabaneta. Mucho menos reconoció que el abandono gubernamental y la falta de presupuesto obligaran a los reclusos a imponer sus reglas y generar, con la ayuda corrupta de militares, un sistema social basado en los beneficios de unos pocos. laverdad.com / Juan José Faría
Después de las cuatro paredes, la penitenciaría se transformó en el reflejo de los problemas que hoy existen en los barrios marginados del país.