Será, que bajo ese estado divino, empezará por denunciar que la “revolución” entró en 1998 con una campaña electoral financiada con dineros extranjeros entregados por el BBVA a la empresa Concertina NV. Dejará ver que el gobierno de Chávez se estrenó con los casos de corrupción del Bolívar 2000; del Fondo único Social 2002-2004; del asalto contra las reservas internacionales del BCV; del fraude de las Notas Estructuradas (2005) de los ministros Tobías Nóbrega, Nelson Merentes, Rafael Isea. Podrá dilucidar, de verdad, qué ocurrió con el edificio adquirido con sobreprecio por el TSJ. Aclarará los casos de los Bonos Argentinos y el de las Transferencias de 12.000 millones de dólares que hasta el 2006, hiciera Hugo Chávez, con destino y uso desconocidos. Se hará justicia en el caso del robo impune contra el nonato Central Azucarero Ezequiel Zamora, de la compra de bancos por Ricardo Fernández Barrueco y Arné Chacón, de los casos de ProArepa, Mercal y la mafia de alimentos. Investigará sobre las ingentes cantidades de dólares depositadas en la banca estadounidense por los generales Maneiro, Morgado, Rangel Silva, Carvajal y Rodríguez Chacín. Además sabremos, el por qué USA los vinculan con el narcotráfico y las FARC. Por fin se sabrá sobre las contribuciones en dinero a candidatos presidenciales de otros países, incluyendo el maletín de U.S. $ 790.500 dirigido a Cristina Fernández y el por qué, presuntamente, están indiciados Hugo Chávez, Henry Rangel Silva, Rafael Ramírez y gobernadores comisionistas, según afirmaciones de Carlos Kaufman en el juicio de Miami. Además, investigará sobre los Contratos de PDVSA que Rafael Ramírez se da a sí mismo. El caso de los 9.000 empleados fantasmas de la Alcaldía Mayor que cobraban bajo la administración del alcalde Juan Barreto. Las estafas de los bonos Brady, el “pago” al Banco Mundial, el chanchullo de la cuenta de Activos en Divisas de BCV, el caso Bandes, del Fondo Chino-Venezolano, el caso de sobrefacturación Derwick 2010, la entrega de las minas Las Cristinas a China, el caso de cocaína Air France, que entre otros casos, lo ayudarían a ennoblecer su “lucha contra la corrupción y la guerra económica”. Si esto de verdad sucediera; entonces, no nos quedaría más que quitarnos el sombrero ante su eminente y reputada investidura.
Víctor Vielma Molina/Educador/victormvielmam@gmail.com