Estaba tan feliz y orgulloso del delfín que acababa de matar, que no se le ocurrió mejor idea que la de posar junto al cadáver y subir la foto a Facebook. Esta “hazaña” le costó una denuncia al pescador peruano Salvador Aliaga Canoza.
La Procuraduría especializada en delitos ecológicos y ambientales del Ministerio del Ambiente dio con el sujeto y lo denunció penalmente por el delito contra los recursos naturales en la modalidad de extracción ilegal de especies acuáticas.
Asimismo, solicitó a la Fiscalía Provincial especializada en materia ambiental de Arequipa iniciar las investigaciones correspondientes.
De ser encontrado culpable, Aliaga podría ser condenado a 5 años de prisión, pues la extracción, procesamiento y comercialización de delfines está prohibida en nuestro país.
“La única manera de poder extraer delfines del mar es cuando se realiza exclusivamente con fines de investigación científica o de difusión cultural para acuarios, zoológicos y delfinarios, y con previa autorización del Instituto del Mar del Perú”, indicó Julio Guzmán, procurador público del Ministerio del Ambiente a Inforegión.
La publicación de la polémica fotografía se realizó el último lunes 28 y causó revuelo e indiganción en los usuarios de internet, quienes de inmediato dieron la alerta.
Fuente: LaRepublica