El ciudadano británico de origen iraní de 44 años Bijan Ebrahimi, víctima del ataque, había sido detenido por tres agentes de Policía después de que un vecino alertara a las fuerzas del orden de que había visto a un hombre tomando fotografías de niños, informó el diario británico ‘The Independent‘.
Según el periódico, cuando los agentes llegaron a la casa de Ebrahimi, en Bristol, algunos vecinos estaban gritando que era un pederasta.
Ebrahimi fue puesto en libertad sin cargos después de que se supiera que estaba fotografiando a unos menores que estaban destrozando sus flores y que no se trataba de imágenes indecentes. Es más, el día de su detención él mismo llamó a la Policía para denunciar que varios niños se encontraban sin permiso dentro de su propiedad.
Sin embargo, los rumores de que Bijan era un pedófilo se extendieron rápidamente por el barrio y dos días más tarde, un vecino (Lee James) lo atacó, mientras que otro (Stephen Norley) lo ayudó a arrastrar el cuerpo al patio de la finca. Allí lo rociaron con gasolina y a continuación lo quemaron.
La familia de Ebrahimi ha criticado duramente a la Policía por no haber hecho lo suficiente para protegerlo después de permitir que se le señalara