El polémico paso de Justin Bieber por Argentina dejó un agridulce sabor de boca a sus admiradoras y provocó tanta irritación entre algunos sectores que fue demandado judicialmente y censurado en el norte del país en protesta por su presunto ultraje a la bandera argentina.
La municipalidad de Capayán, un departamento de unos 16.000 habitantes ubicado en la provincia norteña de Catamarca, a 1.100 kilómetros de Buenos Aires, decidió suspender la emisión de las canciones del cantante canadiense en su radio municipal y pidió a otros medios que se sumen a la medida.
La decisión se tomó cuando comenzó a circular en Internet un vídeo en el que se ve al cantante “barriendo” el escenario con una bandera argentina.
Un comunicado emitido por la municipalidad de Capayán y firmado por su alcalde, Alfredo Hoffmann, expresa el “repudio al artista de origen canadiense Justin Bieber por su actitud frente a nuestra bandera nacional”.
“Hemos suspendido la emisión de cualquier canción de Justin Bieber y solicitamos a los distintos medios que se adhieran a esta medida teniendo en cuenta el desprecio que demostró hacia la insignia patria nacional”, dijo a Efe el secretario de Gobierno de Capayán, Miguel Juárez.
El objetivo de la medida es “expresar el repudio frente a una actitud que consideramos denigrante hacia todos los argentinos”, agregó el funcionario.
El municipio “no prohibió nada”, matizó, sino que “se suspendió la difusión de Justin Bieber y en ese sentido solicitamos la adhesión a los distintos medios, porque creemos que tiene que haber un sentimiento de ‘argentinidad'”.
El gesto de Bieber con la bandera desató en el país un aluvión de críticas hacia el cantante, quien unos días después se justificó en Twitter.
“He oído sobre lo que está pasando conmigo en Argentina y estoy sorprendido. No quise nunca hacer nada para faltarle el respeto a Argentina, a la gente de Argentina o a los fanáticos”, escribió el canadiense.
Además, explicó que él pensó que lo que estaba en el suelo era una camisa, no una bandera.
“Estoy mal por que tomaron mis acciones de forma incorrecta y espero que puedan perdonar este error”, concluyó Justin, quien el pasado día 10 suspendió su tercer y último espectáculo en Argentina alegando padecer una intoxicación alimentaria cuando había cantando durante menos de una hora.
“Más allá de todo lo que haya pasado, están atentando contra la libertad de expresión”, dijo sobre la medida Paula “Miki” Vázquez, miembro del equipo del club de fans de Justin Bieber en Argentina.
Vázquez sostiene que el cantante “tiene la orden de sacar todo lo que tiren sobre la pista de baile porque alguien podría tropezarse”.
“Además, el mismo Justin salió a aclarar lo que pasó, no es necesario llegar a tanto, es demasiado”, sostuvo Miki Vázquez, quien agregó que “hay cosas peores, como haberse retirado del recital, que es peor que haber levantado o no haber levantado la bandera”.
Para Miguel Juárez, sin embargo, “las disculpas se piden personalmente, pero lo analizaremos dentro del ejecutivo municipal para determinar hasta cuándo continuaremos con esta medida”.
Por si fuera poco, un abogado argentino ratificó una denuncia judicial contra Justin Bieber por presunto ultraje a la bandera del país, delito contemplado en el Código Penal argentino con penas de uno a cuatro años de prisión.
“La bandera es mucho más que un pedazo de tela: nos representa y por ella murieron muchos”, afirmó a Efe el abogado denunciante Jorge Alberto Estrada.EFE.