Carlos, de 64 años, que será juzgado por “ultraje”, niega haber tratado a una funcionaria de la administración penitenciaria de “sucia judía”, al margen de su proceso en apelación en mayo, declaró su abogada Isabelle Coutant-Peyre.
El venezolano está preso en Francia desde hace cerca de 20 años, después de su detención en Sudán por la policía francesa en agosto de 1994. Fue condenado a cadena perpetua el 18 de junio, con un mínimo de tiempo de 18 años a partir de la sentencia, para cualquier revisión de medida, por cuatro atentados cometidos en Francia hace 30 años.
Cumplía ya una condena a cadena perpetua, pronunciada en 1997, por el asesinato de tres personas, entre ellas dos policías, en París en 1975.
AFP