El Vaticano indicó este sábado que se había expulsado del sacerdocio a unos 400 religiosos durante el pontificado de Benedicto XVI, tras un aumento de las denuncias por abusos sexuales contra niños.
“En 2012 fueron alrededor de 100, mientras que en 2011 fueron alrededor de 300”, declaró el portavoz de la Santa Sede Federico Lombardi.
Para la Red de Supervivientes de Personas Abusadas por Sacerdotes (SNAP por su sigla en inglés), “el papa tiene que empezar a expulsar del sacerdocio a los eclesiásticos que cubren crímenes sexuales, no sólo a aquellos que los cometen. Mientras esto no ocurra, las cosas cambiarán muy poco”, agregó en un comunicado.
El jueves, el Comité de la ONU sobre los Derechos del Niño había pedido a la Iglesia Católica que actúe con mayor resolución contra los abusos sexuales a menores de edad, un enorme escándalo sobre el que el papa Francisco, quien sustituyó a Benedicto XVI este año, expresó su “vergüenza”.
Por primera vez, los representantes del Vaticano respondieron a las preguntas acerca de los abusos cometidos contra menores por religiosos católicos formuladas por los expertos de este comité, cuyas conclusiones se publicarán el 5 de febrero.
Durante más de una década, la Iglesia Católica se ha visto sacudida por una cascada de escándalos de abusos sexuales cometidos por religiosos contra menores, que empezó en Irlanda y se extendió a Alemania, Estados Unidos y varios países latinoamericanos, como México.
Los abusos fueron a menudo encubiertos por los superiores de los autores, que en muchos casos los transfirieron a otras parroquias, en lugar de denunciarlos a la policía.
En el 2005, Benedicto XVI había prometido apartar a todos los encubridores de abusos sexuales dentro de la Iglesia, pero no lo logró.
En diciembre, la Santa Sede se había negado a responder al cuestionario que le envió en julio el comité de la ONU, sobre unas 4.000 investigaciones eclesiásticas actualmente analizadas por la Congregación para la Doctrina de la Fe, la cual no suele difundir sus trabajos. AFP