Esta información fue aportada por el planificador del Centro de Investigación en Educación y Seguridad Vial (CIES-Vial), Jacobo Vidarte, quien añadió que entre las causas más comunes están el exceso de velocidad, utilizar teléfonos celulares, comer, maquillarse, ingerir bebidas alcohólicas o cualquier objeto distractor audiovisual que pueda interferir en la concentración del chofer. Para que ocurra un hecho de tránsito debe unirse uno o más de las “malas actitudes” anteriormente mencionadas.
Decir “accidentes de tránsitos” es utilizar un término equívoco para referirse a los siniestros, pues con ese vocabulario se infieren a casos fortuitos donde se exime de responsabilidad a los autores y protagonistas de los hechos. Cuando la realidad es que el incumplimiento o desconocimiento de la ley no puede considerarse como una casualidad, consecuencia inevitable o “algún hecho involuntario, culpa de un designio divino o de mala suerte”.
Los estados Aragua y Carabobo en menos de una semana han registrado dos siniestros viales en donde ha sido lamentablemente protagonizado por medios de transportes de uso masivo y escolares, razón por la cual se empeora el panorama y el número de involucrados. En Valencia contabilizaron cinco niños y un adulto calcinados cuando la Wagoneer en la que viajaban para la escuela se incendió tras chocar contra un poste. Mientras el pasado viernes, en la vía que conecta a la ciudad de La Victoria con Zuata, se registró la muerte de seis personas entre ellas un adolescente de 13 años.
Si bien es cierto que las personas responsables de los siniestros son normalmente las que están inmersas en el hecho, no se puede evadir la corresponsabilidad que tienen los entes gubernamentales y la ciudadanía en pleno para evitar los sucesos que pueden terminar en muertes violentas. La educación para las nuevas generaciones y el seguimiento de las normas es tareas de todos conocerlas, respetarlas y ser partícipes para que se conozca la misma información y se pueda generar cada vez experiencia y madurez en el manejo.
MÁS DE 25 MIL SINIESTROS OCURREN ANUALMENTE EN ARAGUA Y CARABOBO
Vidarte indicó que aunque ocurren menos hechos de tránsito donde está involucrado el transporte público, son los que arrojan mayor cantidad de personas lesionadas. En el estado Aragua y Carabobo las últimas cifras indican que entre 22 mil y 25 mil han sido los siniestros registrados anualmente en estas regiones, “afortunadamente pocas muertes se han contabilizado”.
Acotó que encuestas que el CIES-Vial ha aplicado a la ciudadanía han arrojado que los transportistas públicos tienen un prestigio muy bajo en la sociedad. La mayoría de la gente coincidió en que son “malos conductores, irrespetuosos y que la imagen de ellos cada vez va más deteriorada”.