Los presuntos “desórdenes mentales” que afectan a niños y adolescentes, están fundamentados en una serie de parámetros y comportamientos que no tendrían un fundamento científico.
Por El Toque, RNW
La anti siquiatría dispara contra los diagnósticos de desórdenes mentales que “etiquetan” y estigmatizan a niños y adolescentes. Desde esta óptica, los presuntos “desórdenes mentales” que afectan a niños y adolescentes, están fundamentados en una serie de parámetros y comportamientos que no tendrían un fundamento científico.
Margarita Ibáñez, de la Comisión de Ciudadanos de los Derechos Humanos en Latinoamérica (CDDH), afirma en El Toque (escuchar la entrevista) que los desórdenes bipolares, el ADHD, los problemas de ansiedad y otros diagnósticos, además de “etiquetar” a los niños, benefician a la industria de los fármacos.
“El trastorno por déficit de atención se ha vuelto moda y el problema es que queremos copiar lo que hacen en Estados Unidos”, dice Margarita en el programa de radio para quien, “el etiquetar a un niño por el simple hecho de ser niño como un enfermo mental no es solo un abuso a ellos, sino a toda la humanidad”.