La doctora Ramona Matos, uno de los 7.400 médicos cubanos participantes en el programa del Gobierno brasileño de contratación de profesionales extranjeros para atender las áreas más pobres del país, se refugió anoche en el Congreso a la espera de lograr asilo, informaron hoy fuentes oficiales.
Matos pasó la noche en la sede del gabinete del partido opositor Demócratas (DEM) en la Cámara Baja y permanecerá en el Congreso por un plazo indeterminado debido a que corre el riesgo de ser detenida y deportada, dijo a Efe un portavoz de la formación derechista.
“La médica estaba desde octubre pasado en Pacajá (municipio en el estado amazónico de Pará) y consiguió huir el pasado sábado porque ya era vigilada por la policía por sus críticas a las condiciones financieras en las que tenía que trabajar”, afirmó un portavoz de Ronaldo Caiado, diputado del DEM en la Cámara Baja.
Según la fuente, la profesional cubana buscó la ayuda de Caiado debido a que el diputado había denunciado el año pasado que el acuerdo con Cuba sometería a los médicos cubanos a condiciones análogas a la esclavitud y que, por esa razón, ofrecería apoyo a todos los que quisieran desertar y solicitar asilo en Brasil.
La médica alega haber sido engañada por el Gobierno cubano debido a que recibe 400 dólares por su trabajo en Brasil pese a que el acuerdo entre ambos gobiernos prevé el pago de 10.000 reales (unos 4.166,7 dólares) mensuales por cada profesional.
Según Matos, el Gobierno cubano le informó de que otros 600 dólares serán depositados mensualmente en una cuenta en Cuba, pero sólo podrá reclamarlos al final de los tres años del contrato.
La doctora también denunció en el plenario de la Cámara de Diputados que el Gobierno cubano la engañó al prometerle que podría traer temporalmente a su familia a Brasil y dijo que vivía mejor con 200 dólares mensuales en Bolivia que con 400 dólares en este país, que consideró muy caro.
Caiado anunció que Matos podrá permanecer de forma indeterminada en las oficinas del DEM en la Cámara Baja, donde ni la Policía Federal brasileña ni las autoridades cubanas tienen jurisdicción.
El diputado denunció las supuestamente difíciles condiciones a que se ha sometido a los médicos cubanos que llegaron al país en los últimos seis meses.
El caso será analizado mañana reuniones con el Colegio de Abogados de Brasil (OAB) y con el Ministerio Público para poder iniciar inmediatamente las gestiones para la solicitud del asilo.
Caiado presentó ante el Congreso el contrato que la médica firmó con la Sociedad Mercantil Cubana Comercializadora de Servicios Médicos para trabajar en Brasil, lo que, en su opinión, demuestra que el Gobierno brasileño mintió al anunciar que los profesionales isleños fueron contratados mediante un acuerdo en el marco de la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
La fuente dijo igualmente que la cubana denunció que su teléfono en Pacajá estaba intervenido por la policía, que tenía prohibido abandonar esa ciudad amazónica, que era vigilada y que algunos agentes llegaron a buscarla en el puesto médico cuando se enteraron de su intención.
Matos relató que su esposo vive en Estados Unidos y aseguró que teme ser detenida si regresa a Cuba o que su hija, que permanece en la isla, sufra represalias.
El programa “Más médicos” cuenta actualmente con cerca de 9.000 profesionales distribuidos en 2.166 ciudades y 28 distritos indígenas, en los que ofrecen atención a 23 millones de personas.
El “Más médicos” fue creado en respuesta a las protestas multitudinarias que ocurrieron en cientos de ciudades de todo el país el pasado junio en demanda de mejores servicios públicos. EFE