Marvinia Jiménez Márquez es una venezolana de 36 años edad, madre de un niño, profesional del corte y la costura, víctima de una golpiza propiciada por una funcionaria de la GNB el pasado lunes 24 de febrero durante una manifestación en la urbanización La Isabelica de Valencia, recientemente puesta en libertad durante la noche de este miércoles, tras pasar 48 horas detenida. Aquí el relato de su agresión.
Entrevista realizada por: Mirla Castellanos @mirlac
En primer lugar, ¿Qué le dijo los médicos? ¿Cómo se encuentra de salud?
“Gracias a Dios ya ha pasado bastante tiempo, me pusieron tratamiento y estoy bastante mejor de las lesiones que me ocasionaron”.
Luego que el mundo ha visto las fotos y vídeos de lo que le sucedió: ¿Cuál fue el motivo para que esa funcionaria de la Guardia la agrediera de esa forma?
“En estos momentos ya no puedo hablar de esos motivos porque están en proceso de investigación en el Ministerio Público. Me abrieron dos procedimientos: uno como víctima y dos en el que estoy implicada por cosas incomprobables, indemostrables. De la Fiscalía viene gente de Caracas directamente que están resolviendo el caso”.
¿Qué pasó por su mente en ese momento que le caían a golpes? ¿Tuvo miedo de morir en ese instante al verse tan indefensa?
“Es horrible que no solamente una persona, sino varias personas te caigan en cayapa y más cuando son autoridad. Si se te paran enfrente, te leen derechos y te dicen: está detenida por tal cosa, tú verás si te resistes o no. Pero si te caen directamente y te comienzan a golpear, te violan todos tus derechos, te ponen expuesta y no te dicen ¿por qué?, ¿Qué está pasando? y te llevan, es una sensación horrible vivirla y cuando recibes golpes en masa, peor todavía. Cuando ves que la gente está observando, que hay guardias armados observando y no hacen nada es humillante y es muy horrible lo que se siente”.
Si tuviera a la funcionaria que le propino esa golpiza frente a frente y al resto de los funcionarios que se quedaron alrededor solo viendo lo que le sucedía sin hacer nada, ¿Qué les diría?
“Eso viene desde las bases, del entrenamiento que a ellos les dan, los cansados que están. Son personas mal pagadas que están en sitios con excesos de horas de trabajo y van a cobrar lo mismo, pasando trabajo, mal comiendo y salen a la calle a retener a esta gente de lo cual ellos no están entrenados. Pienso que esa gente está entrenada para otros tipos de acciones, no para retener, ellos no saben controlar, si no que te van agrediendo, arremeten contra las personas directamente, creo que el orden público no va con ellos honestamente, dejan mucho que desear”.
¿Por qué le llevan detenida? ¿Qué alegaron al momento de privarle de su libertad?
“A mí me llevan detenida y entre comillas porque nadie me dijo nada, nadie en ningún momento dijo usted queda detenida por tal o cual cosa. Me llevan al comando y nadie me dijo nada, yo en ese momento comienzo a exigir que me quiten las esposas. Les decía quiero que me vea un médico, quiero llamar a mi familia y quería un abogado. A las cuatro horas estábamos detenidos, cinco personas en total en ese momento (dos golpeados y tres personas en perfecto estado de salud.
Entonces siento que se me violaron los derechos desde un principio, porque no me permitieron el derecho a defenderme con un abogado. A que mi familia supiera que estoy bien, a que me viera un médico y me aplicara un tratamiento en el momento, absolutamente todo eso es irregular. Luego me tienen dos días en la policía que es una jurisdicción muy diferente, en todo caso en Valencia me llevan a los guayos. Me agarra la guardia y me llevan es a la policía, no me permiten comunicarme, corre en las redes vídeos y periódicos de lo que me paso, y Marvinia allí escondida en ese sitio donde me tenían, sin que mi familia supiera de mí, ni mis abogados de lo que me pasó.
Yo me enteré de todo lo que había ocurrido cuando me llevan justamente a la presentación. De resto no sabía nada de lo que estaba pasando fuera. Son esas irregularidades que todo el mundo observa, no solo Marvinia, tanto ustedes los periodistas, como el resto de las personas que observaban y grababan lo que ellos observan y ahora me imputan a mi como delito, pienso que es simplemente el accionar de un teléfono y una cámara que grababa todas sus aberraciones, sus violaciones”.
¿Cómo fueron esas largas horas que estuvo tras las rejas?
“Es feo, el médico que me vio fue a las seis de la tarde de ese día, cuatro horas después de lo que me había pasado. Y no fue un médico que me hiciera una evaluación como tal, como lo meritaba la situación, fue un médico que estaba en el ambulatorio de la Isabelica de guardia, me pusieron una vía para el dolor. Fue impresionante el dolor que me ocasionó esa chica con esos golpes. Y el resto de los días allí, bueno se podrán imaginar”.
¿Cree que existe justicia en Venezuela?
“Más que un llamado a la justicia yo diría a la impunidad, al querer ponerte cargos. Donde hay seis vídeos que evidencian que yo en ningún momento le di ningún tipo de agresión hacia los funcionarios, yo en ningún momento alenté a las personas a que levantaran botellas y esas cosas, me imputan cargos que de verdad son vergonzosos. El derecho a manifestar lo tenemos todos, de un lado y del otro, todos tenemos algo en común que es mejorar nuestra calidad de vida, calidad de vida en servicios, en todo, educación, comida, todo, absolutamente todo”.
¿Cuál sería su llamado a todos los entes del gobierno?
“El llamado más allá de la paz también es a que reflexionen, que abran puentes para escucharnos a nosotros. Y nosotros no somos oposición, nosotros somos Venezuela. Si nosotros nos unimos en eso y el Ministerio Público, todas las dependencias del estado, nos permiten entregar siempre nuestras peticiones, yo creo que fuera mejor. Uno convoca a una marcha para entregar un pliego donde están las peticiones y nos sale un piquete de la guardia, entonces ellos dicen que nosotros nos expresamos mal, no nos expresamos mal, simplemente no permiten que nuestras peticiones se escuchen. Se hacen oídos sordos, uno no sabe cómo decir, oye mira tentemos que encontrar esto o aquello, tenemos escasez en los anaqueles”.
¿Qué le exige al gobierno un venezolano cuando decide salir a protestar?
“En todas las manifestaciones pacíficas Marvinia ha estado. Marvinia hoy es un nombre, realmente que todos pueden ver, una cara que todos pueden observar, pero realmente salimos a manifestar es por un sentimiento de todos los venezolanos. Incluso los que no manifiestan, los que están del lado del gobierno, lo padecen, lo sienten y lo viven. Y es todo lo que tiene que ver con las agresiones, ese exceso de violencia, esa escasez que hay, no se consigue nada, así tengas dinero no puedes comprar, si trabajas no te alcanza, la inseguridad, son muchos factores que influyen”.
¿Cómo es la Venezuela que sueña Marvinia? ¿La puede describir?
“Sueño con esa Venezuela bonita que en algún momento tuvimos, por lo menos yo que tengo 36 años, y lo viví, mis tías me sacaban a pasear, uno podía dejar las puerta abiertas sin tanto miedo, acostarte tarde la noche, no había tantos problemas de inseguridad graves, si los había pero no en esas cantidades, hoy te matan y arremeten contra ti. Parte de la juventud volcada en drogas y en delincuencia, hay una descomposición social muy seria que no es la que yo quiero, quiero vivir en paz. Quiero que mi chamo viva en un sitio armónico, en convivencia pacífica, en donde todos nos queramos. Que a pesar de las diferencias políticas construyamos un fin común en armonía”.