La tormentosa relación sentimental de Yemmy Elisea Amundarain, de 38 años, terminó en un dramático desenlace. La madrugada de éste sábado fue asesinada por su concubino Leonel Rodríguez Vidal (32), en una habitación de la casa N° 42 que compartían, ubicada en la calle Villa Bonita del barrio Nueva República, en El Tigre. eltiempo.com.ve /Sol Vargas García
La hija de la víctima, cuyo nombre nos reservamos por respeto a la Ley Orgánica para la Protección de Niños, Niñas y Adolescentes (Lopna), contó que durante la semana su mamá y el padrastro tuvieron constantes discusiones a causa de los celos del hombre.
Este viernes la situación se agravó cuando Yemmy decidió salir temprano para atender el negocio que regentaba con parientes, la licorería Comercial Genis en La Charneca.
Antes habría preparado la vianda a Leonel para que se la llevara a la obra donde labora como albañil.
Las horas transcurrieron. El hombre llegó agitado y de mal humor, a eso de las 5:00 pm. Le dijo a la hijastra que tenía hambre y ella le ofreció arepas para la cena. Hizo igual con el resto de la familia.
La muchacha, angustiada, decidió llamar a su madre para preguntarle a qué hora tenía previsto llegar a la casa para guardarle algo de comida.
A las 11:40 pm se apareció Yemmy en su residencia en compañía de una hermana que enseguida se fue.
La infortunada mujer, al percibir un ambiente hostil, se dispuso a jugar y hacerle mimos a su nieta de ocho meses. Posteriormente manifestó que estaba cansada y quería acostarse.
La adolescente le sugirió que durmiera en el cuarto con ella, su yerno y la bebé. Inclusive le colocó un colchón en el piso porque tenía un mal presentimiento. Pero su progenitora se empeñó en pasar la noche junto a su marido.
A las 4:00 am, la chica se levantó sobresaltada. Se asomó por la ventana que da hacia el patio y se percató de que no estaba la bicicleta, trató de salir pero el manojo de llaves había desaparecido de la mesa.
Notó que todas las puertas estaban con el cerrojo pasado, incluyendo el cuarto de la pareja. Tocó varias veces, pero nadie abrió.
Las circunstancias conllevaron a abrir un boquete desde un área contigua, donde pudieron observar a Yemmy tirada en el piso y con una almohada encima de su cara.
Con la desesperación, la joven y su esposo tumbaron la puerta del cuarto y trataron de reanimarla, pero no tenía signos vitales. De su boca salía un burbujeo, la piel estaba morada y tenía laceraciones en los brazos, posiblemente a causa del forcejeo y la angustia de evitar ser asesinada por el hombre con quien vivió durante cinco años.
Una amiga de la víctima señaló que Leonel fue denunciado tres veces en la policía de Simón Rodríguez, pero Yemmy retiró las denuncias, lo perdonó y le dio otra oportunidad.
El año pasado intentó estrangularla, entonces se separaron por siete meses, pero en diciembre pasado se reconciliaron y decidieron alquilar la casa donde ocurrió el crimen.
Lo buscan
El presunto homicida Leonel Rodríguez Vidal se encuentra huyendo, pero es buscado por los entes policiales. Presumen que está escondido en Atapirire, en el municipio Miranda. Los cinco hijos de la víctima piden justicia y que lo encarcelen.