El papa Francisco advirtió hoy que la dictadura del pensamiento único, que “mata la libertad de los pueblos y de las conciencias”, aún está presente en la sociedad por lo que es necesario “orar y permanecer vigilantes”.
“Todavía hoy se da la dictadura del pensamiento único. Una dictadura que mata la libertad de los pueblos, de las personas y de las conciencias. Es necesario orar y permanecer vigilantes”, aseveró hoy el pontífice en la misa celebrada en su residencia, Santa Marta.
Durante su homilía, el papa explicó la cerrazón de los fariseos ante el mensaje de Jesús y criticó a todos aquellos que, del mismo modo, tienen “el corazón y la mente cerrados” y que no son capaces de recibir el “mensaje de novedad” portado por Cristo.
“Es un pensamiento cerrado que no está abierto al diálogo, a la posibilidad de que haya algo más (…) No se trata de testarudez. Es algo más. Es idolatría del pensamiento propio”, afirmó Bergoglio.
Esta incapacidad de abrirse al diálogo es la causante, según el papa, de muchas de las desgracias que la humanidad ha padecido.
“El siglo pasado hemos conocido las dictaduras del pensamiento único, que costaron la vida a muchas personas pero que, en el momento en el que los dictadores se sentían los dueños, no se podía pensar de otro modo”, subrayó.
El pontífice argentino alertó de que aún hoy existe la idolatría del pensamiento único y alegó que, en muchas ocasiones, si una persona no piensa como el resto, es criticada por no ser moderna ni abierta.
Esta imposición del pensamiento llega, según explicó durante su alocución en la misa, a afectar el ámbito político ya que, en muchas ocasiones, cuando un gobernante pide una ayuda financiera, se le imponen directrices a la hora de legislar.
“Vigilad y rezad. No seáis bobos. No compréis cosas que no sirvan, sed siempre humildes y orad para que el Señor siempre nos conceda la libertad del corazón abierto”, señaló. EFE