El primer petrolero ha zarpado de una de las plataformas de Prirazlómnoye, situada en el Ártico ruso. Lleva a Europa una nueva marca de crudo, que los tecnólogos de Gazprom han bautizado como ‘Arctic Oil’, o ‘ARCO, reseñó RT.com
Esta primera partida de hidrocarburos extraída del lecho del golfo de Pechora (que forma parte de las aguas del mar de Barents) partió rumbo al puerto neerlandés de Rotterdam. Se trata por ahora de unas 70 toneladas, pero al final de este año tiene programado exportar cerca de 300 toneladas de este nuevo petróleo
Los principales destinatarios serán las refinerías de los Países Bajos, Noruega y el Reino Unido. El destino de las primeras partidas será la venta directa y en un futuro Gazprom espera conseguir unos contratos a largo plazo.
“El acontecimiento de hoy es de mucha importancia para apuntalar la postura de Rusia en el mercado mundial de petróleo”, comentó el Presidente ejecutivo de Gazprom , Alexéi Miler. “Hemos elevado la flexibilidad y la seguridad de los suministros de petróleo prácticamente a todas las regiones del mundo”.
El yacimiento petrolífero fue descubierto por los geólogos en 1989. Se ubica en la plataforma continental a una profundidad de tan solo 20 metros, a unos 60 kilómetros de la costa norte de Rusia. Los expertos estiman el volumen total del crudo extraíble de su depósito natural en casi 72 millones de toneladas.
La plataforma cuenta con una serie de ventajas que la convierten en la más segura del mundo, tanto para el personal que la explota, como para el medioambiente. La acumulación del petróleo extraído dentro de un medio acuático, aunque aislado de las aguas del mar, asegura que no se evapore el crudo y no se produzca una explosión por una alta concentración de vapores explosivos en el aire.
Todos los pozos (habrá 36 dentro de varios meses) se encuentran dentro de la plataforma, que está instalada firmemente sobre el lecho marino. Eso reduce al mínimo la probabilidad de un derrame no controlado de crudo.