Barack Obama se dio un pequeño lujo y salió a caminar por las calles de Washington este miércoles, algo poco habitual para un presidente estadounidense, que en general se mueve en vehículo blindado aunque sea por unos metros.
“El oso está suelto”, bromeó el mandatario de muy buen humor al salir caminando de la Casa Blanca para dirigirse al ministerio del Interior, a dos cuadras de su residencia.
“Hace bien salir”, exclamó el mandatario escoltado por guardaespaldas y con la chaqueta al hombro.
Durante el corto trayecto conversó con turistas, algunos chinos e israelíes, según periodistas que lo acompañaron.
Luego de pronunciar un corto discurso en el Ministerio, en el que anunció que la región natural de Nuevo México (suroeste) fue puesta bajo protección federal, Obama volvió caminando a la Casa Blanca y a su paso saludó con la mano a otros turistas.
Es raro que Obama salga en pleno día por las calles de Washington. Generalmente se traslada en limusina blindada. En alguna ocasión, el mandatario había confesado que no poder desplazarse libremente era uno de los aspectos que más le pesaba de ser presidente. AFP