El genio Lionel Messi contra el muro Manuel Neuer, la defensa argentina ante el dúo Müller-Klose o el enfrentamiento entre los dos mejores medios del Mundial, Toni Kroos y Javier Mascherano, son algunos de los duelos de la final del Mundial del domingo entre Argentina y Alemania.
– El muro Neuer contra el genio Messi –
El portero de 28 años, que llegó con dudas al Mundial por un problema en los hombros, vive en estado de gracia casi un mes después. Sus salidas del área para cubrir la espalda de su defensa y sus reflejos bajo los tres palos han sido claves para que Alemania avanzara en la segunda fase del Mundial.
Neuer, 51 veces internacional, fue además el gran vencedor de su duelo precedente con Messi, en la semifinal de la Liga de Campeones de 2013, cuando el Bayern Múnich vapuleó al Barcelona (7-0 en los dos partidos de la eliminatoria).
En Brasil-2014 ya superó a otras estrellas, como Cristiano Ronaldo en la primera ronda (Portugal, 4-0) o Karim Benzema en cuartos de final (Francia, 1-0). Pero Neuer quiere evitar el recorrido que tuvo su predecesor en el puesto Oliver Kahn, sublime durante el Mundial 2002 hasta que falló ante el brasileño Ronaldo en la final.
En esta ocasión el astro será un Messi que viene de completar su partido más discreto del Mundial en semifinales ante Holanda (0-0, 4-2 en los penales). El argentino fue incapaz de hacer daño en la estructura defensiva de la selección Oranje.
La “Pulga”, autor de cuatro goles en la primera fase del Mundial, quiere recuperar el olfato ante la portería contraria en la final luego de tres partidos sin marcar.
Tiene ante sí el reto de alcanzar a Diego Maradona como ídolo absoluto del pueblo argentino, después de que guiara a la selección al triunfo en el Mundial de 1986, y convertirse en una de las mayores leyendas de la historia del fútbol.
– Kroos y Mascherano se disputan el medio –
Ya era conocido en el mundillo del fútbol, pero el planeta entero conoció su nombre en el ‘Mineirazo’ (victoria alemana 7-1 ante Brasil). Toni Kroos fue protagonista en la histórica victoria con dos asistencias, para un total de cuatro en el torneo (es el mejor pasador junto con el colombiano Juan Guillermo Cuadrado) y sus primeros dos goles.
Fue una inmejorable manera de celebrar su 50º partido con la Mannschaft (7 goles) para el centrocampista de 24 años, preferido por el seleccionador Joachim Löw para llevar las manijas del juego, en detrimento de Mesut Özil, desplazado a la banda a pesar de que prefiere jugar por el centro.
Ante Brasil, sostenido por la poderosa dupla que forman en el mediocentro Sani Khedira y Bastian Schweinsteiger, Kroos tuvo libertad para sumarse al ataque, con la calma y la precisión que caracterizan su relación con el balón.
“Ha completado muy buenas actuaciones durante la Copa del Mundo, ha progresado mucho en agresividad y recupera muchos balones. Además de sus cualidades técnicas, está muy seguro con el balón”, dijo el jueves el ayudante del seleccionador Hansi Flick.
Enfrente estará Javier Mascherano, de 30 años y auténtico capitán de Argentina, puesto que ocupaba de manera ‘oficial’ hasta que cedió el brazalete a su amigo Messi.
El ‘Jefecito’, que en los últimos años retrasó su posición en el Barcelona para jugar como central, ejerce como mediocentro en Argentina. Su excepcional actuación en Brasil la coronó en semifinales con un partido soberbio, coronado con un despeje de balón en una jugada de Robben que pudo decantar el choque.
Si Messi es el líder del juego albiceleste, Mascherano es “el símbolo, el emblema”, como explica el seleccionador Alejandro Sabella. Maradona es más explícito, para él Argentina es “Mascherano y diez más”.
– Müller-Klose, atención peligro –
Si Joachim Löw opta por el mismo once que en cuartos y en semifinales, los dos atacantes estarán de nuevo asociados, Klose en punta y Müller en una banda. El primero, de 36 años, viene de lograr el récord absoluto de goles en la Copa del Mundo (16) y jugaría su segunda final después de la que perdió ante Brasil (2-0) en 2002, selección de la que es el único superviviente.
Evidentemente más lento, Klose (136 partidos y 71 goles) sigue siendo un maestro del primer toque, un finalizador de jugadas con instinto para convertir en gol todo lo que le llegue dentro del área.
Müller, que ya suma diez goles en la Copa del Mundo (5 en Sudáfrica y 5 en Brasil) está en el camino para destronar a su compañero. Pero más allá de su innegable olfato, en este torneo el atacante del Bayern Múnich se ha convertido en el auténtico motor del ataque alemán, siendo protagonista en la mayor parte de las jugadas de peligro.
Generoso en el esfuerzo, directo y con un estilo peculiar, Müller, 55 partidos internacionales y 22 goles, ya es el líder de la Mannschaft.
Enfrente estará la defensa argentina, sostenida por el dúo formado por Martín Demichelis y Ezequiel Garay. El primero de ellos, de 33 años, entró en el último momento en la lista para Brasil y se hizo con la titularidad después de que Federico Fernández se mostrara muy inseguro en los primeros partidos.
A su lado Garay ha demostrado gran madurez y solidez, marcando además uno de los penales que clasificó a Argentina para la final. Ahora falta saber si estarán igual de acertados con la potencia de Müller que con la velocidad de Robben. AFP