Sabemos que arreglarte cada mañana cuesta trabajo, sobre todo si tu día empieza muy temprano y esto implica levantarte 10 minutos antes. Sin embargo, esos 10 minutos bien invertidos en tu imagen pueden traer grandes cambios a tu vida. ActitudFem
1. Autoestima
Está comprobado que si nos gusta lo que vemos en el espejo nos sentimos mejor automáticamente. ¿No les pasa que cada vez que van al salón de belleza salen motivadas? Es por esta sencilla razón.
Si el espejo te devuelve una imagen de ti que te guste levantará tu autoestima y te dará más seguridad para caminar en el mundo. Y todas sabemos lo importante que es caminar seguras.
Esta es la razón principal, la más importante. No estamos hablando de grandes producciones, cada una tenemos un estilo único y si el tuyo es muy sencillo, ¡está bien! Lo importante es que lo que veas te guste.
2. Tu carta de presentación
Esto puede no gustarnos pero chicas, como nos vemos nos tratan. Así de simple. Tu imagen es tu carta de presentación al mundo, es lo que percibe la gente de entrada, así que si andas fachosa, desarreglada o descuidada pensarán que así eres siempre.
Insistimos, no se trata de grandes producciones (a menos que así lo decidas tú) si no de mantener una imagen limpia, ordenada, cuidada, con ropa sin agujeros y el cabello en su lugar.
3. Es más fácil socializar
¿Se acuerdan que en primaria nadie le hablaba a la niña sucia? Pues la vida adulta es similar. Una persona descuidada con su apariencia no inspira confianza y no te dan ganas de acercártele. Mantener una imagen limpia y arreglada con poquito de rubor y rímel te abre muchas puertas con personas interesantes.
Esto funciona tanto para conocer amigos como para conseguir un mejor trabajo y resultarle más atractiva a un buen prospecto de novio. Vernos lindas en el espejo, desde la cara hasta la punta de los pies, nos hace sentirnos más seguras y nos da más confianza para relacionarnos con otras personas.
4. Estás lista para cualquier evento
Si desde que sales de casa estás arreglada no importa a dónde te lleve la vida, siempre te verás bien. Si conoces a alguien que te invita por un café o a cenar puedes ir sin necesidad de regresar a casa a arreglarte. Con un poco de lipstick y un retoque de maquillaje estarás más que lista para ir a donde sea.